-Para responder eso voy a necesitar que me ayudes, junto a tu amigo, cuando despierte, ya que yo, sólo se que tuvieron un accidente, pero necesito saber qué pasó.
-¿Qué necesita saber? -preguntó Isaac sin saber exactamente a que se refería el doctor.
-Como principal, y menos importante, ¿qué estaban haciendo? O sea, adonde iban. -el doctor miraba al paciente y preparaba la lapicera para ponerse a anotar.
-Estábamos llevando a la hermana de Joaquín a su colegio. El manejaba. -dijo señalando a su amigo cuando lo nombro, cosa que hizo suponer al doctor que el dueño del auto era Joaquín.
-¿Y que pasó mientras iban?
-No se, estabamos hablando, ella iba atrás, en el medio. Jugando con sus tonteras y después no se, yo miré a la ventana y se sintió la frenada y nada más, no me acuerdo más. -se notaba el nerviosismo cuando hablaba.
¡Mentira! Pero, ¿por qué miente? Eso no paso, esta escondiendo algo. Ojalá el doctor note sus nervios, por favor, se notó que estaba mintiendo, vamos.
-Bien, ¿y anoche? -el doctor lo miró levantando una ceja mientras paraba de anotar algo, por cierto, me pregunto que anotará.- Había una factura de compra con los datos de tu amigo.
-Si, anoche salimos. Pero sólo fue un rato. -el doctor asentía con la cabeza como afirmando que ya lo sabía, o lo suponía.
-Y en la factura había algo tachado. ¿Podrias nombrarme que compraron en total? -el doctor prestó atención a la factura, ya que la tenía a un lado del anotador.
-Mm.. No lo se, cervezas, whisky, lo normal para divertirse. Unos cigarrillos y... -por un momento se trabó, como dudando si decir algo o no- Nada mas.
-Esta bien, si tu amigo despierta toca este timbresito. -le dijo el doctor parándose a señalar el botón.- O cualquier cosa que pase. Todavía tengo mis dudas.
-Yo tengo una pregunta, ¿Cómo es su nombre? -preguntó Isaac repentinamente.
-Ah, ¿no te lo dije ya? Bueno, soy el doctor Ethan, Ethan West. -señaló la plaquita que llevaba en el bolsillo de su guardapolvo. - Cualquier cosa toca el timbre y pregunta por mi.
El doctor salió de la habitación y yo decidí seguirlo, no tenía nada más para hacer en la habitación, y de seguro Isaac se dormiría. El doctor llegó hasta la recepción de la enfermera y puso el anotador de forma que ella pueda leer lo que le señalaba con el dedo.
-Creo que está ocultando algo, y necesito saber exactamente que es lo que hizo o esta por hacer.
En el anotador decía: "Dudas: droga, veneno, preservativos, armas".
Yo no creo capaz de algo así a Joaquín. Aún que no nos sorprendería si lo dijera, pero no creo y nunca creí que haga algo de eso.-Esta bien, ¿hay algo que pueda hacer?
-Si, por favor, mantengalo vigilado y aviseme, además de avisarme si despierta el amigo.
-Esta bien doctor West. -asintió con la cabeza y continuó escribiendo en la computadora mientras el doctor se iba rápido.
Yo no sabía que hacer, si volver a la habitación, quedarme aquí o ir a otra parte. Me decidí en volver a la habitación por si despertara Joaquín, pero antes de llegar me puse a pensar en si no despertara, si se quedara dormido para siempre, yo sentiría hasta culpa. Unas lágrimas repentinas se escaparon de mis ojos sin mi autorización, aún que no me preocupó demasiado, creo que nadie podía verme, pero salí corriendo por inercia, era lo que siempre hacían en las películas, correr adonde me sienta cómoda, y ese lugar era mi casa, mi hogar, y mejor si estaba Joel ahí. Quiero verlo.
En las calles se veía lo normal, gente que anda de aquí para allá, charlando, algunos relajados otros molestos pero no me importaba, yo seguía corriendo y ni si quiera sentía cansarme, normalmente no hubiera soportado ni una manzana, pero ya llevaba como quince. Cada vez las cosas me llamaban más la atención o me sorprendían y quería averiguar que más sentiría... ¿Sentiré?
A lo mejor sólo me estoy imaginando sentir que doy pasos, o que respiro y tengo que pesañear. Quizás no nesecite nada de eso, y voy a intentarlo.
Pero no en casa, y ya había llegado. Entrar allí fue feo y hermoso a la vez, me sentía bien llegando a casa una vez más, estando ahí, saber que tendré a Joel al frente y que esta todo igual, pero se sentía mal o feo el no poder hacer nada y que nadie me vea. Quisiera hablar con Joel y decirle lo mucho que lo quiero. Y al parecer no voy a poder hacerlo nunca jamás.Apenas entrar lo primero que se me ocurrió hacer era ir a su habitación, pero en cuanto lo hice noté que estaba dormido, por simple inercia me acerque en puntitas para no hacer ruido, y me acorde gracias a una gran sorpresa, que me exhaltó, que no podía escucharme.
-No te escucha. -asintió un chico de más o menos unos 25 años casi en un susurro. Aún que parecía adolescente. Estaba apoyado en el marco de la ventana y con los brazos cruzados.- Podrías gritar o hacer un gran berrinche y no se va a despertar, no te escucha. Y de seguro te preguntas quien soy, o qué es lo que haces y hago acá. ¿Verdad?
Yo sólo asentí algo asustada y con la respiración apurada. No todos los días pasa algo así, ¿A caso este chico se teletransporta? ¿O qué es? ¿Le pasó lo mismo que a mi? ¿Estaba ahí desde que llegué?
-Perfecto, por que exactamente para eso vine a darte una visita, vengo a darte explicaciones, a cerca de lo que pasa, te pasó o va a pasar. Ya que puedo... perdón, podemos verlo todo.
ESTÁS LEYENDO
Una muerte con locura. [Pausada]
Historia CortaEsta es una historia de una familia que pareciera ser feliz por mas de que tengas inconvenientes, como en cualquier otra. Pero un día a esta familia la ataca la desgracia y llega una muerte, pero no es una muerte cualquiera, ya en la familia comienz...