Confusión.

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Episodio 15:

Sherry se encontraba viendo televisión en el living de su departamento cuando sintió los torpes pasos de Jake quien gritaba llamándola, parecía que la fiebre había vuelto a subir ya que este murmuraba cosas sin sentido.

-Jake... -le habló parándose delante de el- Vuelve a la cama, debes hacer reposo.

-Sheryyy... -dijo el al verla- Volveré si vienes conmigo si no, no. -habló seductor-

-Estás delirando, vuelve ahora. -respondió enojada la rubia- No estoy para tus juegos.

-¿Juegos? -rió Jake- ¿Quieres jugar? ¡Pues juguemos! -dijo divertido-

-¡Jake! -gritó apenas Jake la tomó en brazos- ¡Nos caeremos idiota! ¡Bájame!

-Noup... -respondió gracioso-

Jake se tropezó con sus propios pies y ambos cayeron al suelo, el sobre Sherry. Sherry respiraba agitada, siempre terminaban muy cerca y aquello la ponía nerviosa, ni hablar de Jake a pesar de estar alucinando por la fiebre era consciente de lo que sentía al tenerla así, bajo el, en sus brazos. Mierda. Sherry le miraba observándole, Jake era su chico malo, era el típico amor platónico de toda chica y cada vez lo amaba y quería más. ¿Jake siquiera sentía algo?

-Sherry... -susurró-

-No Jake... -dijo la rubia intentando apartarlo- Es por la fiebre. Detente.

-No puedo, quiero... -se acercó a ella-

-¡No! -gritó saliendo se debajo de el- Vamos a la cama o pediré una inyección para ti.

-No quiero. -reprochó cual niño pequeño-

"Debería filmar esto, seguro no se creerá lo infantil que se ve en estos momentos" pensó sonriente, tomó a Jake del brazo y haciendo uso de toda su fuerza lo llevó hasta su habitación y lo acostó. 

-Te quedas ahí. -le advirtió-

Fue a por otro tazón de sopa y unas toallas húmedas, nuevamente repitió todo el proceso de la mañana. Jake parecía un verdadero niño con la tremenda fiebre que había pillado. Luego de asegurarse de que Jake se encontraba estable y dormía nuevamente, tomó sus llaves y se dirigió a la clínica gubernamental, los mejores médicos estaban ahí y era donde Piers se encontraba recuperándose de su brazo. Preguntó por el en administración y le indicaron su habitación, 268. Cuando se encontró frente a la puerta de su habitación dudo si entrar o no, pero entro de todas maneras.

-¡Piers! -exclamó alegre al verle- ¿Cómo estas? -el sonrió-

-Bien, ya ves necesito una mano. -bromeó y ambos rieron- ¿Tu cómo estas rubia?

-Bien no vine antes por que cuidaba de Jake. -le comentó-

-¿Qué le pasó al idiota? -se burló Piers y Sherry le reprochó con la mirada-

-Fiebre. -dijo sin más- Ha tenido temperaturas muy elevadas y a incluso llegado a alucinar, pero ya esta mejor. -sonrió ante aquello-

-¿Puedo decirte algo? -preguntó el con pudor y ella asintió- Tu me gustas Sherry, no hablo de solo gustar de atraer, me gustas, me encantas, te adoro, te quiero y te amo. -ella articulo una "o" con sus labios, estaba sorprendida- Sé que es todo muy de repente, pero temo que el te re conquiste y te pierda y pierda toda oportunidad. -suspiró con pesadez- También se que no sientes nada por mi, que me ves como un hermano y mejor amigo. -ella asintió afirmando aquello- Pero necesito que sepas eso enana, no quiero que te alejes de mi por decirte esto ni nada... Solo me gustaría que siquiera me dieras la oportunidad de demostrarte que de verdad puedo hacerte feliz.

Ella suspiró, Piers era tierno, atento, una dulzura de personas, quizá era un príncipe pero no para ella. De eso estaba segura, ella amaba a su chico malo, su lobo, Jake era su todo. Por más que quisiera abrirle su corazón a otro no podría, solo utilizaría a la otra persona y no quería que Piers pasará por eso. El se merecía a una hermosa chica que le amara incondicionalmente como el ahora lo hacía con ella.

-Piers yo.... -habló pero el la interrumpió-

-No necesito una respuesta ahora rubia. -sonrió mostrando su blanca dentadura- Piénsalo, no te presiono. Siempre seremos mejores amigos, de eso jamás dudes. -le aseguró- Siempre estaré para cuando me necesites.

-Bueno... -respondió-

Sabía que por más que le diera mil vueltas al tema, no podría estar con el. No quería herir el noble corazón del castaño, el merecía algo mejor. Por más que ella quisiera corresponderle, su corazón ya le pertenecía a otra persona y era Jake Muller. Se despidió del castaño y volvió a su departamento, Jake aún dormía por suerte.

Bastante confundida se encontraba ahora Sherry, Piers se le había declarado finalmente, Jake la estaba volviendo loca con sus acercamientos y acciones, tenía ganas de dejarle a otro decidir por ella que hacer. ¡Estaba totalmente descolocada! Nadie debía salir herido, nadie merecía sentir dolor alguno por ella y odiaba que su mejor amigo se hubiera enamorado de ella. Entró en su habitación y se dejo caer en su cama, necesitaba pensar y mucho o terminaría por darse golpes contra la pared cual loca.

Piers era un romántico empedernido, Jake un caballero renegado. ¿Qué se suponía debía hacer? Generalmente una chica iría a por Piers, el era perfecto por así decir pero amaba a Jake y no querría engañar a su amigo dándole falsas esperanzas. Debía decidir que hacer.

Y hasta ahora la única opción era......... permanecer sola.

Continuara...


Otra vez tu... (JyS) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora