Mi pecado 〔Eunhae〕ㅤ

Juegos Paralelos.

Buenas... mis actualizaciones han sido algo directas, pues no ha habido mucha comunicación entre lectora y escritora.

Esta fanfic ha sido una montaña rusa para mí, siempre vuelvo a ella para releer y terminar reescribiendo algunas cosas, originalmente comencé escribiéndola en el 2015 pero muchas cosas han ido cambiando con los años.

Bien, espero ahora poder ver más que solo visitas y votos si no que también poder interactuar con ustedes.

Espero le guste el capítulo.

Disfruten.

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Mi mente había colapsado.

Cuando logré reaccionar, le di un pequeño empujón y di varios pasos hacia atrás, no podía creer lo que acababa de pasar.

—¡Oye! ¿Por qué me empujas?— Se quejó.

Noté el tambaleó en su voz.

—Pensé que tú lo querías también.— Dijo antes de hacer un torpe puchero y tomándome del brazo.

Me solté de inmediato, ella resopló.

—Dara, estás demasiado borracha, no puedes ir por ahí besando a cualquiera.—

—No es a cualquiera, es a ti, sé que tarde o temprano vas a caer.— Murmuró acercándose nuevamente a mí.

Tomé sus muñecas para poder apartarla. —Dara, no estoy interesado, en serio, evítate pasar estas vergüenzas.—

Ella me vio sorprendida por un momento y luego se echó a reír.

—Ya veo, hay alguien más que te gusta.— Suspiró —Anda, dime ¿Cuál es su nombre?— Me dijo mirándome desafiante

—¿De que hablas?— Le pregunté intentando evitarla.

Ella rodó los ojos y de acercó más a mí.

—El nombre de la que te gusta, no puede ser más linda que yo, ¡Mírame!—

—Dara, por Dios, soy gay.—

Su expresión cambió inmediatamente. Pude ver la vergüenza reflejarse gradualmente en su rostro antes de girar la mirada hacia otro lugar. 

—Perdón por molestarte... creo que debo ir a otro lugar.— Murmuró apenas antes de irse a otra dirección.

Resoplé exhausto acomodando mi cabello hacia atrás. Era la primera vez que me confesaba con un extraño pero se había sentido tan bien.  Instantes después, caminaba entre la multitud para llegar al lugar en donde Yesung me había dicho que estaban.

Ellos se encontraban en una mesa cerca al escenario, parecía el mejor lugar para escuchar a la banda en vivo y disfrutar del evento ya que también la barra estaba a solo unos pasos para pedir las bebidas. Al verles, me acerqué a ellos con una sonrisa torcida, aún estaba conmocionado por lo que había sucedido.

—¡Donghae! ¿Estás bien? ¿Eso es sangre?— Me preguntó Yesung levantándose de su silla. Sabía perfectamente lo violento que podía ponerse así que negué rápidamente con la cabeza mientras intentaba limpiar los restos de lápiz labial de mis labios.

Solté un pesado suspiro, aún avergonzado y molesto. Me senté en una de las sillas libres, al lado de Sungmin, sintiendo las miradas de todos sobre mí.

—Una chica borracha me robó un beso cuando venía de los baños.— Murmuré intentando desviar mi mirada de ellos, no quería hacer un escándalo con el tema.