No pude evitarlo, esta ves no me alejé de él. No pude hacerlo, ya no tenía fuerzas. Sentía como la temperatura iba subiendo, lo noté al sentir las manos de Johnny en mi cintura, haciendome ademán de que me acercara más hacia él.
_ Johnny – pude decir entre sus labios. Y un ruido se escuchó en el desván de la escalera. Johnny se alejó rápidamente de mí, mientras yo intentaba recomponer la calma.
_ No quise molestar – era Ivonne, sonriendo desde la escalera. – No se preocupen por mí, vine por un vaso de agua, creo que hoy todos tuvimos sed – dijo bromeando. Mire a Johnny de reojo y ví como sonreía a mi costado.
_ Bueno bueno, la verdad es que he escuchado ruido y no he visto a Sam a mi lado y me he preocupado, pero si les ayuda, supongo que Vanessa también estará por bajar porque oí ruido en su habitación – dijo sentandose rápidamente a mi lado. Johnny y yo nos miramos. – No me agradezcan – dijo soltando una pequeña sonrisa.
_ Que hacen todos aquí a esta hora? – era Vanessa, bajando rápidamente por las escaleras y frotandose los ojos.
_ Van, bajamos con Sam a buscar algo de agua y nos hemos encontrado – dijo Ivonne, dejandome sorprendida por su actuación – De todas maneras, ya nos ibamos, no Sam? Me ha agarrado mucho sueño...
_ Oh, claro – dijo Vanessa, intentando recomponer las piezas de las palabras de Ivonne a tan temprana hora. – Johnny, subes cariño?
_ Claro – dijo con una mirada que desconocía. Lo notaba frío. – Ve subiendo, fumaré un cigarro.
No pude evitar sentirme mal. No me arrepentía de nada de lo sucedido esa noche, pero aún así sabía que algo no estaba bien. Ivonne tomó de mi mano y subimos sigilosamente las escaleras, mientras Vanessa subía detrás nuestro. Nos saludamos en el desván y entramos a nuestras habitaciones.