Capitulo 10

471 22 1
                                    

Es domingo y estoy tomando el sol cuando llega Santiago para cumplir con su jornada semanal.

—Lo siento, pero no podrás bañarte hasta dentro de un rato —dice mientras se arrodilla y echa unos líquidos en el sistema de filtrado de la piscina.

La verdad es que hace tanto calor que no me vendría mal un remojón, pero da igual. Los cincuenta largos que me había propuesto hacer ya son historia. Creo que mi récord está en treinta y cinco.

—¿Qué tal la semana? —pregunta—. ¿Has ido a algún estreno?

—Desgraciadamente, no. —Me incorporo y subo un poco el respaldo de la tumbona para verlo mejor—. Pero anoche fui a Skybar. Estuvo bien.

—Qué guay. ¿Viste algún famoso?

—Solo a Isla Montagne. Y a Zayn.

—Isla Montagne. Caray... menuda elementa, ¿eh? Un amigo mío trabajó como jardinero en la casa de su padre y jura que intentó seducirlo entre los arbustos.

—Haciendo honor a su fama —añado—. ¿Y él que hizo?

—Según él, nada, tiene novia, pero no sé... —añade con una sonrisa—. ¡Dios, qué calor hace hoy! —exclama mientras se limpia el sudor de la frente y se quita la camiseta—. ¿Y Zayn? ¿Está en casa?

—No —contesto—. Se quedó anoche en el Mondrian.

—¿Crees que podría tomar un vaso de agua del bar?

—Claro —contesto—. Yo te lo traigo.

Cuando vuelvo encuentro a Santiago sentado en las escaleras de la piscina con los pies en el agua. Le ofrezco el vaso.

—Gracias. ¿Te importa si fumo?

—Hum, no. —Dudo un poco, pero supongo que da igual si se fuma un cigarrillo.

—¿Quieres? —me ofrece.

—No, gracias, no fumo.

Y en cuanto se enciende el cigarrillo, Zayn abre la puerta corredera y aparece en la terraza. Al verlo, Santiago se pone de pie de golpe y apaga el cigarrillo en el enorme cenicero cilíndrico de acero.

—Perdón —se disculpa—. Me estaba tomando un descanso.

—Ya lo veo —comenta Zayn cortante y luego me mira divertido.

Santiago camina hacia el otro lado de casa para hacer su trabajo, imagino, y yo me levanto.

—Bueno, ya me voy —le digo, pensando en subir a mi cuarto para dejarlo descansar tranquilo.

Zayn Be GoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora