"Friends"

¿Segura?

Abri los ojos relajadamente pensando que era un lindo dia sabado, cuando recuerdo que era miercoles y tenia una presentación de historia coeficiente 3. Me levanto y veo mi telefono cuando veo que estaba atrasada media hora. Me maldije a mi misma y juré que me iba a vengar de Niall por tener que quedarme despierta hasta las 3 A.M, enseñandole matemáticas.

Rapidamente chocando con todo a mi paso, me meti al baño y me di una ducha tiempo record.

Me puse una polera holgada con un estampado de New York, mis leggins negros y mis hermosas converse.

Baje apresurada las escaleras y cuando estaba por llegar abajo me tropecé pero unos brazos me sujetaron de la cintura para que no cayera. Levante la mirada y me encontre con unos hermosos ojos pero que ahora queria matar por estar haciendo que llegara tarde.

-Gracias... pero te voy a matar. -Dije con enojo.

-Hola, estoy bien, gracias por preguntar-. Dijo guiñandome un ojo-. Y una pregunta ¿Porque me vas a matar?

- Porque por tu culpa me quede dormida y ahora vamos atrasados.- Dije tomandolo del brazo y guiandolo hasta la puerta-.

Subí al auto de Niall, me acomode en el asiento delantero y me cruze de brazos. Estaba demaciado enojada con este duende irlandés, que mas encima me guiñaba el ojo!

- Cariño... te ves tan linda enojada.- Dijo colocandome un mechon de cabello que caía sobre mi frente-. Perdóname, ¿bueno?

- No .-Dije decidida-. Voy a llegar tarde por tu culpa.

-¿No me vas a perdonar?.- Dijo dudoso-. ¿Segura?.- Levanto las cejas.

-Si, segura.- Dije mirando a la ventana.

-Bueno tu te lo buscaste... bebé.- Dijo moviendo sus dedos y acercándose rapidamente y haciendome cosquillas.

-¡Niall! Para por favor. -Dije riendome como loca, trataba de empezarlo pero Niall era mas fuerte que yo-. Por favor, te lo suplicó.

-¡Di que me vas a perdonar! Y que me quieres.- Dijo riendo, seguramente por mi cara de sufrimiento-. Dilo, fuerte y claro.

-No! .-Dije negando con la cabeza-. Nunca!

-Entonces no parare cariño.- Dijo moviendo las manos en mi estomago-. Dilo, tu sabes que no parare.

Estaba cansada de tanto reir, las lagrimas caian por mis mejillas y mi estomago dolia demaciado. Ok me rindo, aunque me cueste renunciar a orgullo.

-ok me rindo!.-Le Dije demaciado agitada-. Para duende, por favor.- le rogue.

-Te falta algo linda.- Dijo recordandome la otra parte del trato.

-Pero... ok esta bien.- Dije agotada-. Te quiero Pocito y mucho.- Paro de hacerme cosquillas-.

-Esta bien... ahora podemos irnos.-Dijo sonriendo triunfante-. Ya que vamos atrasados.

Me saque las últimas lagrimas de mis ojos, lo mire y me acerqué a su mejilla y deje un suave beso.-Perdona por echarte la culpa.- dije susurrando en su oido.