One shot: Una noche para olvidar

Una noche para olvidar

Samuel, Guillermo, Alex, Mangel, Rubén, Luzu y Frank, a través de skype, decidieron irse a una cabaña alejada de gran parte de la sociedad para descansar del tan agitado mes que habían vivido, ese en el que viajaron por primera vez a latinoamérica.

-Oye tío, esto me da mala uva. ¿Por qué tenemos que viajar justo cuando es halloween? -dijo Samuel.

-¿Y por qué no hacerlo? Podríamos hacer una fiesta de halloween o ir a una -respondió Guillermo.

-Esa es una buena idea, Willfred -apoyó Luzu a Willy.

-Pero Vegetta tiene razón. Puede que viajemos y que un psicopata-asesino ande suelto como en las películas -habló Alex.

-Alex, tío, eso sólo pasa en las películas -dijo Mangel.

-Voy con una condición; que volvamos reventadísimos de tanto festejar.

Y con eso, se selló el plan. En los siguientes días, cada uno preparó su maleta y dejaron unos vlogs avisando que tomarían unas vacaciones.

[...]

El dia 30 de octubre partía su vuelo. Y ese día había llegado. Decidieron ir a un pueblo Noruego del cual Rubén escucho una que otra vez (el cual afirmaba que "era la hostia").

Después de unas horas, llegaron a su país de destino. Se fueron en un taxi al pueblo del que hablaban. Bajaron de este y resulta que lo único que había ahí eran tres casas muy separadas, una especie de bosque, una cabaña lejana y un gran gimnasio.

-Esto definitivamente no es la hostia -se lamentó Rubén.

-¡Bienvenidos turistas! ¿Vienen por la celebración de halloween? -dijo un desconocido apareciendo de la nada. Los chicos dieron un salto del susto repentino.

-¿Hay una fiesta? -preguntó Guillermo.

-Eh... Sí, la habrá. Pero como ya deben saber... Hay una sorpresa.

-¿Una sorpresa? ¿Y se podría saber cuál?

-Si te digo la sorpresa, dejaría de ser una. Por cierto, soy Luigi.

-Es como el de wigetta... -le dijo Samuel en un susurro a Willy.

-Sí... Tienes razón. ¿Coincidencia? -le respondió en el mismo tono.

-Mm... Lo dudo -ambos chicos empezaron a reír.

-¿Eh? ¿Y qué les pasa a esos chicos? -preguntó extrañado Luigi.

-Supongo que el amor los pone tontos... -respondió Luzu.

Ante este comentario, Guillermo y Samuel se sonrojaron.

-Si es que se ven tan tiernos... -dijo Mangel.

-¿Eh? ¿Te parecieron tiernos? -inesperadamente, y ni si quiera a saber por qué, Rubén se puso celoso.

-¡Uh! ¡Rubius se puso celoso! Debería haber traido la cámara... -exclamó Luzu.

-Pero si tienes cámara en el móvil, parguela... -le respondió Frank.

-Shhh, calla.

-¿Se quedarán a dormir en la cabaña? Hay espacio para 7 personas -dijo Luigi.

-¿Y cuantas habitaciones hay?

-Hay tres habitaciones.

-Entonces vamos a tener que compartir habitación.

-Chicos ¿qué opináis de la propuesta?

-Yo digo que nos quedemos.

Todos menos Luzu y Rubén exclamaron al unísono un "¡Yo también!".