Capítulo 3

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No sabía como arreglarme, bueno para mí no es normal ir a la universidad, !No sé con que ropa ir! Siempre utilizo ropas viejas, y de metal para entrenar, no he salido de estas paredes desde años. ¿Por qué siento que mi vida esta por cambiar mas de lo que espero?

- Toc toc -Glinda apareció en mi puerta- ¿estas bien?

Suspiré- Si, solo que espero hacerlo bien. Sé que no debería estar así con estas dudas. Pero me siento como una chica de 19 ahora. Y no es normal porque no debería sentirme así, soy un androide.

- Sé que esto es duro para ti créeme, sabía que iba a pasar eso por eso te hacía repasar el plan y discúlpame si te presioné mucho, pero te entiendo ¿sabes? A Josh se le ocurrió un muevo plan a ultima hora y pues todos estamos con los pelos en punta.

- ¡Es que estoy aterrada, lo acepto!, ¿Qué pasa si todo sale mal? Todas esas víctimas habrán muerto en vano.

- Confío en ti, Nad. Eres fuerte, mas fuerte de lo que crees. Te he conocido durante todos estos años y pues se que eres una chica muy valiente.

Me dio esperanza, Glinda confiaba en mi.

- Que bonitas palabras, gracias en serio -la abracé.

- Solo digo lo que creo, linda. Lo harás bien. No te sientas presionada, ¿si?

Solo asentí

- ¿Quieres que te ayude con la ropa? -pregunto Glinda sonriendo.

- Me harías un enorme favor, no tengo ni idea como se va, lo único que tengo es esta armadura de metal y algunos trapos viejos.

- Pues me fije en eso Nad, por eso...

Glinda se paró y se dirigió a la salida del cuarto. Cuando regreso trajo varias bolsas de compras.

- Esto te quedará bien -dijo

- !Oh por Dios!, esto es buenísimo -respondí agradecida sacando lo que había dentro de las bolsas.

- Sabía que te gustaría, agradece que tienes hay una mujer aquí, porque seguro que estos animales te hacían ir con cualquier cosa que lleves puesto.

- Muchas gracias Glinda, de nuevo.

Aquí estoy, estoy afuera de la Universidad de Kingdom, de mi futuro, de mis planes contra Marshall.

- ¿Estas segura que puedes tu sola? Hace años que no sales a las calles, lo estas tomando muy normal y eso no es normal, waoooo dije algo que rima -dijo Josh al aparcar su auto en el estacionamiento de la universidad.

- Yo no tomo nada con normalidad porque bueno... ya sabes -guiñé el ojo- Aquí vamos -suspiré, saliendo del auto.

Me tocaba Historia, sonreí. Al menos se en que curso estaré mas que bien, cuando estaba aburrida me he leído todas las obras de historia, pues eso me entretenía.

Pero, ¿Qué aula me tocaba?

Miré el papel, no entiendo nada de lo que dice acá que rayos significa PJ 102, genial, tengo el destino del país en mis manos y no puedo encontrar ni una puñetera au...

Choqué contra algo y caí como un costal de patatas, ¿que paso aquí? Abrí los ojos, todas mis cosas estaban regadas, vi a un chico levantándose del suelo, tenía el cabello negro, ojos claros y un gran cuer... una gran altura. ¿En qué estoy pensando? Seguro es uno de esos tipos que se creen el centro del mundo y tratando como juguetes a todas las chicas con su sonrisa picarona, también he leído sobre eso. Recogí mis cosas dispersas y esperen, ¿donde esta mi horario?

- ¿Te encuentras bien? -dijo el chico dirigiendo sus ojos verdes hacia mí sonriendo y entregándome mi horario y ahí está, he acertado la sonrisa típica.

- Ahhh, estoy perfecta y gracias -respondí seca, y me di la vuelta.

- ¿Eres nueva? -me detuvo con su mano, con su sonrisa "soy el rey del mundo" de nuevo.

Voltié- Waooo que listo- sonreí irónicamente

- !Que tal carácter! Bueno ha sido un gusto en conocerte chica brava, soy Tyler, ah y el aula PJ 102 está a tu costado -me guiñó el ojo y se fue.

Y yo estaba ahí, mirando como se dirigía al aula PJ 102.

Entré al aula, sentí como todos los ojos se concentraban en mí, genial soy la chica nueva, seré la comidilla de los chismes.

Me senté en la única carpeta que quedaba libre, al costado de Tyler, a simple vista parece un tipo sociable, ¿Por qué rayos no se sentaría nadie a su costado?

- Hola de nuevo -me sacó de mis pensamientos, ahí otra vez no.

- Hola.

- ¿Acaso no tienes sentido del humor, nunca vas a sonreír?

- No y no.

-¿Qué tienes conmigo? Yo fui amable contigo y te ayudé a encontrar el aula porque sino aun estarías vagando por todo los lugares.

- Tienes razón, muchas gracias -dije con mi mas falsa sonrisa que tengo.

- Eso claramente no fue una sonrisa, mas bien fue una mala mueca.

Iba a responder hasta que el profesor de historia entró.

- Buenos días, jóvenes. Como sabrán seré su profesor de historia. Mi nombre es Rob Saltzman -se presentó escribiendo su nombre en la pizarra.

Gran entrada, pensé.

- Este día veremos sobre las guerras que se dieron en nuestra nación, veremos todo sobre nuestra localidad.

Bueeeeeno, pero que coincidencia mi tema favorito.

- ¿Alguien tiene alguna idea de lo que vamos a tratar?

Levanto la mano, no la levanto, la levanto, no la levanto.
La levanto.

- ¿Qué quiere añadir, señorita.... Jhonson? -terminó la pregunta viendo una hoja que seguramente eran la lista de los alumnos.- ¿Usted es nueva?

- ¿Otro listo? -escuché decir a Tyler con su sonrisa de siempre. Estoy empezando a odiar a ese tipo.

- ¿Puedes callarte y dejarme en paz? -le respondí

- Lamentablemente no puedo, me gusta no se... ¿Molestarte?

Rodeé los ojos, pero ¿qué le pasa? Espero que nadie se tan idiota como él.

- ¿Que tanto cuchicheo hay ahí? -nos interrumpió el profesor.- Joven Marshall ¿puede dejar de desconcentrar a la señorita?

¿Escuché bien? ¿Marshall? Oh por dios, este tipo es familiar del del... Y he conversado con él.
Ahora veo de donde viene la idiotez.

- ¿Señorita Jhonson? ¿Se encuentra bien? -el profesor me sacó de mis confusos pensamientos.

- Sí... Creo.

No, realmente no estoy bien.


No soy una simple chicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora