1

573 49 10
                                    


"Se recomienda reproducir multimedia."

Cr: A

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cr: A.N

Ahora que no puedo verte de nuevo,

¿dónde estás?

Tú a quien no puedo tocar,

¿debemos detenernos ahora?

Me duele hasta el punto en que no puedo soportarlo


Movía su cuerpo con gracia deslizándose sobre el suelo, como si se tratara de una hoja cuyo movimiento permanecía a merced de las suaves brisas de viento que recorrían el lugar. JongIn bailaba como si su vida dependiera de ello.

<<Despidiendo sus recuerdos>>

Despidiendo a su corazón que se rompía cada vez más ante la tristeza que abrazaba la totalidad de su ser corrompiendolo cada vez más hasta dejarlo al borde del abismo de desesperación .

La lluvia caía con la insistencia digna de una tormenta. Y a la lejanía, la silueta oscura de un muerto en vida que a través de suaves vaivenes de cadera y recatado movimiento de brazos, desenvolvía su cuerpo en constantes pasos de ballet tatuados con la palabra tristeza en cada uno de ellos.

En ese mismo lugar, donde lo había visto por última vez. La luz de luna se colaba entre la copa de los arboles iluminando todo a su paso con un tenue color blanco, las sombras eran la constante en aquel bosque que ha sido testigo de las luchas, victorias y derrotas de un joven perdido.

Su ropa blanca, empapada y casi traslucida revelaba el cuerpo delgado del joven muchacho agitarse ante las vibraciones de una melodía que solo él oía.

<<Su corazón marcaba el paso>>

Esa sería la última vez que bailaría. La última vez que la nada infinita sería testigo del sufrimiento de su alma a través de su arte, porque su numen ya no estaba a su lado. Y eso le destrozaba.

— JongIn...— Habló la voz de sus dulces pesadillas. — ¿qué haces? — El gatillante ideal que dio paso a que las lagrimas descendieran por sus ojos para mezclarse ante cada gota de lluvia que recorría sus mejillas en ese momento.

<<Sin embargo, no se detuvo>>

— No puedo más, KyungSoo, — Susurró agitado mientras obligaba a sus piernas responder para la perfecta realización del mejor Fouetté de su vida. Por que a pesar de que el barro cubriera sus zapatillas dificultando cualquier acción, quería sentir la emoción de vivir una vez más. De ganar una lucha aunque la guerra ya se haya declarado perdida.

Recordar la ultima vez que bailó para él. El que fue su mejor publico, su mejor juez, el mejor amigo y el amor de su vida.

— Si puedes, JongIn, — Comentó esperanzado — Me tienes a mí. — La seguridad de su voz vaciló por un instante, JongIn lo notó.

KyungSoo no se había movido de su sitio, apoyando su mano contra un árbol podía sentir que ya todo llegaba a su final. Y JongIn tenía miedo, tanto miedo de lo que podría suceder.

— ¡Yo no tengo a nadie! — Bramó, y después del estruendo de su voz todo movimiento de su cuerpo cesó.

<<El viento sigue soplando>>

— Estoy completamente solo en esto...— Completó JongIn.

— No, no lo estas —

— ¡Lo estoy! — Gritó haciendo vibrar sus cuerdas vocales y en un movimiento desesperado emprendió una marcha silenciosa hacia la figura de aquel que le arrebató el corazón.

— Sí, lo estoy... — Susurró destrozado.

— A pesar de todo, yo sigo aquí,— Refutó Kyungsoo, con el labio inferior temblando y ojos acuosos. — ¿Recuerdas? En las malas y en las peores — comentó limpiando una solitaria lágrima — Era nuestra promesa, JongIn. —

— No, Kyungsoo... — Su voz sonó rasposa y rendida. — Debo dejarte ir, superarte y aprender a vivir sin ti. Por que tú no estás aquí. — Terminó susurrando.

Sus cuerpos de encontraban a solo centímetros de distancia.

<<Sólo un poco más cerca>>

— Tú no estás aquí,porque, estas muerto.—Su voz se quebró reflejando el estado actual de su alma en su estado más puro — Estas muerto y te llevaste mi vida contigo.

JongIn acercó su mano al rostro de KyungSoo con la esperanza de que sus propias palabras fueran un simple acto de locura. Que todo lo sucedido en las últimas semanas hubiera sido un simple sueño creado por una mala jugada de su conciencia retorcida

Que Kyungsoo en realidad no murió, que efectivamente, estaba con él en ese momento.

Que esa silueta que lo acompañaba día y noche, sea de carne y hueso, no una ilusión. No sólo un recuerdo.

<<¿Por qué la vida es así? >>

No entendía, pero la verdad le golpeó en el momento en que sus dedos atravesaron, como si se tratara de agua cristalina, lo que recordaba como la suave mejilla de Kyungsoo.

Kyungsoo no era real. Y, su alma lloraba por eso.

— Es hora de irse, KyungSoo. — La lluvia se había detenido, ahora sólo el rocío del agua cristalina resplandecía a su alrededor.

Una escena perfecta para semejante despedida.

— ¿Estarás bien? — Preguntó esperanzado el más bajo.

— Nunca estaré tan bien como cuando estuve contigo. — Una lágrima recorrió su mejilla, ese era el fin. Eliminó el espacio que los separaba  y en una unión mágica se dieron el último beso.

La imagen de KyungSoo se desvaneció en el aire con un brillo singular ante los ojos cristalinos de JongIn, y como arena entre los dedos, este escapó para siempre de su vida.

KyungSoo descansaría en paz y Jongin había perdido aquel que lo era todo, había perdido aquel que le incitó a bailar, había perdido literalmente a su vida.

Porque su vida era Kyungsoo.

¶Hasta aquí, muchas gracias por leer este pequeño OS. La verdad es que esta historia ya la  había subido con anterioridad, inclusive, me inspiré en ella para crear mi otra historia, "B&W" 💚. Pero la redacción y ortografía estaba hecha un asco y pos, aquí está (? . 😐

¶Si hay algún error no dudaré en editar las veces que sea necesario. 😂😂😂

Perfecta Despedida [ KaiSoo ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora