Quiero ser, un lienzo descalzo para que cualquier pintor que firme "Don nadie" me deje tirada en la galería del fracaso y poder sentirme arte.
Quiero ser, una melodía llena de contratiempos que consiga erizar la piel de un sordo y la de un insensible.
Quiero ser, esa botella que ayuda al borracho a burlarse de la ridícula sociedad que de verdad nos ciega.
Quiero ser, el aire que roce los lunares escondidos de la piel del que nunca tiene frío haciéndole temblar con mis suspiros.