Otra noche más sin dormir.
Luego de cinco días desde que mamá falleció, los que ahora seríamos cuatro, seguimos con los espíritus destruidos.
Si la comunicación y la interacción entre nosotros era pésima, ahora sería peor. Nunca he sentido un vacío tan grande en mi corazón.
Como siempre, me levanto de mi cama. Camino lentamente hacia la mesa para nuestra "ración diaria". Al parecer fui el primero en levantarse, de todas formas, nadie tendría razón para levantarse temprano ahora.
Pasé un rato sentado con la cabeza abajo hasta el punto de casi quedarme dormido. Sin embargo, Janice se encargó de evitarlo.
-Mark? Dijo Janice con una voz ronca que indicaba que acababa de levantarse.
-Ah, buenos días.
-Que va a preparar papá hoy? Se notaba que trataba de sonar despreocupada pero yo sabía que
-No sé, creo que no se ha levantado.
-Bueno.
Papá siempre se encarga de preparar la comida, el no sabe cocinar, pero después de todo es sólo comida enlatada.
Pasamos un tiempo sentados sin hablar mucho, hasta que me quedé dormido.
-Mark.
-Ah?
-Será mejor que despiertes a papá, se va a hacer tarde.
-Ugh, ya voy.
Entonces con toda la pereza del mundo, voy a despertar a papá, solo para darme cuenta de que no está en su cama. Así que lo busqué en donde pude, ya que no había mucho lugar donde buscar, pero evidentemente no estaba en ningún lado.
-Hey Janice, tu no lo has visto?
-No, creí que estaba en su cama. Podría estar en el almacén.
Bueno, sería el único lugar donde podría estar, la puerta estaba al lado cama de Joshua el cual estaba dormido, pero decidí preguntarle.
-Josh, Joooosh. No me respondió, pero me miró indicando que me había escuchado.
-Papá ha entrado en el almacén?
-Si. Y volvió a dormir.
Entré en el almacén y busqué entre las estanterías del cuarto, no estaba ahí tampoco.
"Carajo, dónde se habrá metido ese viejo?"
Entonces tomé una lata de granos y salí.
-Jan, toma.
-Hm?
-Cocínalo.
-Que? Y papá?
-No está, el único lugar donde podría estar es afuera.
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Búnker
AdventureLa familia de Mark queda atrapada en un refugio subterráneo, al comenzar una repentina guerra. Todos esperan salir algún día, sin embargo, no saben que destino les espera.