Al oir esto, Ricardo cerro los ojos y abrazo con fuerza a Claudia. Susurrandole al oido:
-Siempre estare a tu lado...
La chica que le habia susurrado a Ricardo, los miró decepcionada y fruncio el ceño diciendo:
-Niñata, comparte un poco.
Sus palabras rompieron la maravillosa escena.
Ricardo la miro enfadado, un gesto de enojo elimino la armonia que se habia creado, miro a los ojos a la muchacha y se veia un desdén de odio.
-¿Quién crees que eres para etiquetarme como "tuyo"?
-Yo.. no queria decir eso..
-Vete.
-Ricardo, por favor perdoname..
Sono el timbre y la chica, corrio pasillo arriba con lagrimas en los ojos.
Ricardo estaba serio y Claudia no sabia que hacer.
-Menuda telenovela...
Se decia Ricardo.
-Ricardo.. ¿Quien era esa chica?
-Ana, del otro curso, lleva enamorada de mi desde que estabamos en primaria. Todos los años lo mismo. Se me declara y se marcha llorando.
-Pero tú.. ¿la quieres?
-No, ya no se ni lo que siento..
Ricardo estaba raro. Claudia presentia un aire de preocupación en el. Ana, era una chica muy guapa y en su grupo más de uno soñaba con sus caricias, pero ella amaba locamente a Ricardo y le prometio que jamás amaria a nadie, solo a él. Le mandaba mensajes todos los días, le invitaba a salir, le hacia regalos.. pero lo que ella nunca supo darle, fue su corazón. Ella no lo queria de corazón, solo era un capricho. Ricardo era un chico guapo pero no le importaban las chicas, era risueño e infantil pero cuando algo no le gustaba, era serio e inexpresivo.
"Este chico es muy interesante" pensaba Claudia"Siempre cambia de actitud de un día para otro"
Llegaron a clases y el profesor dijo:
-Hareis parejas para un trabajo, el que esta al lado basta.
Ricardo miro con brillo en su mirada, y ella le miraba diciendo
-Otra vez tú..
-¡Que suerte que nos haiga tocado juntos, Clau!
-No me llames Clau..
-Vale, Clau
"Estupido..." Pensaba ella mientras fruncia el ceño. Ricardo soltó una carcajada.
Al salir de clases, Ricardo corrio hacia Claudia la cogio del brazo y preguntó:
-Clau, ¿Qué te parece si quedamos esta tarde para el trabajo?
-¿Eh? Cla-Claro. ¿A que hora?
-A las seis, en mi casa, ¡nos vemos Clau!
-¡QUÉ NO ME LLAMES CLAU!
Ricardo se alejaba en la multitud y ella se paro en seco.
"Él solo quiere hacerme feliz"
Y por una vez, ella sonrió.
Llego la tarde y ya era hora de ir a la casa de Ricardo, lo malo era que no se acordaba donde vivia él. Lo raro fue que sono el timbre, y en efecto era Ricardo.
-¿Has venido a recojerme?
-Claro, si no no seria un caballero.
Dijo sonriendo.
Cuando llegaron a su casa, entre medias del trabajo, Claudia pensó "¿Por qué no hay nadie en casa?¿Vivirá solo?"
-Te preguntaras que por que no hay nadie en casa.
-Esto.. yo..
-Mi padre esta trabajando. Y mi hermana pequeña esta en casa de una amiga.
-¿Y tu madre?
-Mi madre... murio hace ya tiempo.
-Lo-lo siento mucho, yo no lo sabia..
-Claro que no lo sabias, nadie lo sabe. Solo mis familiares y yo.
Claudia estaba nerviosa, se notaba que él habia sufrido mucho.
-Siempre hay que mirar la vida con una sonrisa..
Decia él, pensativo.
-Claudia, te tenia que decir algo..
Claudia se extraño, Ricardo nunca le habia dicho Claudia, simplemente Clau, por hacerla rabiar.
-Yo, desde que te vi... Vi a la persona.. más perfecta que jamas habia deslumbrado mi mirada yo.. Te quiero, Claudia
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Te quiero, gilipollas.
RomanceCuando Claudia comienza a odiar la vida aparece Ricardo, un chico inmaduro y divertido que quiere hacerle ver la vida de otra manera, el destino quiere que esa amistad dé otro paso..También al destino le gusta hacer daño, asi que las situaciones har...