Capitulo 1

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Aquella ultima semana en la universidad ha estado muy pesada, en verdad necesito un descanso, estoy agotada y con muy pocas ganas de terminar el último informe del semestre, lo único que quiero en este momento es que mañana, viernes, se pase lo más rápido posible.
Cuando escogí estudiar derecho no pensé que fuese tan agotador, lo escogí, en gran parte por la influencia de mi tía, una gran abogada, la cual admiraba mucho. Ella murió en un terrible accidente de tránsito, del cual no quiero dar detalles. Siempre me había gustado lo que hacía y la forma en que lo hacía, siempre con mucho amor y respeto por su trabajo, ella es mi mayor motivación para sacar adelante este segundo semestre, y los que me faltan, para graduarme y estar cada vez más cerca de ser como ella.
Termino de hacer el informe y me tumbo en mi cama, con la canción Safe and Sound de Capital Cities sonando de fondo. Aún no paro de pensar en todo lo que quiero hacer en sus anheladas vacaciones, quiero estar con David, quiero abrazarlo y decirle cuanto lo quiero, pero no puedo, "una mujer jamás confiesa sus sentimientos a un hombre, son ellos quienes lo deben hacer", ese ha sido mi lema, aunque no lo sigo porque este de acuerdo o porque me guste, solo lo hago porque es lo que dice la sociedad, y lastimosamente, para triunfar hay que seguirla.
Pero si es válido escribirle, le gustaría hablar con él, toma su celular, entra a whatsapp y busca la conversación con él, trata de saludarlo con alegría, ternura y dulzura, pero sin empalagar.

"Hola David, ¿como estás?"

¿Alegría? ¿Dulzura? ¿Ternura? La verdad ninguna. Tampoco pretendo que el note lo que quería expresar, pero es lo que pretendía hacer. Su respuesta no tarda, eso me encanta.

"Hola Mía, muy bien, con muchísimas ganas de descansar, quiero vacaciones ya. Y tú ¿cómo estás?"

Me gusta mucho, lo quiero. Durante los últimos ocho meses lo he estado escondiendo en lo más profundo, en lo más oscuro, en lo más lejano, pero no se va a engañar a sí misma, se ha enamorado de aquel chico alto, ojos negros, y cabello castaño, aquel de sonrisa perfecta y sensacional carisma.
La conversación continúa, nos conectamos Skype para poder hablar mejor, me gusta verlo, quisiera poder ser más que su amiga, quisiera poder ser el motivo de su sonrisa, el motivo de sus alegrías, poder ser su motivación para superar los problemas, para salir adelante, pero el lema, el lema, el lema.
Termino la llamada, el cansancio me vence, lo único que quiero es dormir, cierro el portátil y me voy a la cama. Mañana será otro día. Uno mejor.

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⏰ Última actualización: Oct 14, 2015 ⏰

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