Él tenía enfrente a un muchacho. Nunca lo había visto pero parecía ser su amigo, él y ese muchacho componían, pero sus composiciones no se parecían. Por eso, dejó que el muchacho compusiera su música, quería aprender de él, pero el muchacho dejo de escribir. Le extraño que dejara de escribir y se quedó mirando su rostro; desde afuera veía sus ojos inocentes y por un momento vio lo que él veía, se puso a escribir, pero todo lo que él escribía el otro lo sabía, parecía leer sus pensamientos, parecía saber que letra escribiría mientras aún ni siquiera la tinta tocaba el papel, parecía conocer sus sentimientos, sus sueños y anhelos, hasta sus miedos, pero a él no le daba miedo que él conociera sus miedos, porque él era el otro y el otro era él, eran la misma persona.
Cuando se dio cuenta de esto, extrañamente apareció en una habitación oscura, con algunas luces apenas. Pero lo más sorprendente de ese lugar era el piso, tenía galaxias y estrellas, era algo alucinante. Se movió para empezar a caminar y empezó a sonar música como jamás antes lo había escuchado, movió sus manos, sus dedos, y hasta su cabello y estaba envuelto de música, parecía que la música controlaba sus movimientos, parecía que su ser controlaba la música. Entonces allí apareció el muchacho que había visto antes de estar en ese lugar. - Ves que hermosa música puedes hacer si lo haces desde el corazón. - le dijo. Allí él se despertó. Pero aprendió a hacer música con todo su ser y en su corazón se quedó la música que escuchó en ese sueño.
ESTÁS LEYENDO
La Ciudad de la Música
General FictionAlguna ves has estado en un lugar que parecia un sueño, pero tú sabes que no lo fue, tú sabes en tu corazon que no fue un sueño, si no que es y era la realidad más pura.