Andrea sale de casa para ir a clase como suele hacer todos los días pero, esta vez era distinto. Por alguna cuestión que ella desconoce, sus padres habían tomado la decisión de que cambiara de instituto. Por suerte su amiga Laura había convencido a sus padres para que le dejaran cambiarse con ella.
Al llegar a clase no sabía qué hacer, tanta gente nueva y desconocida le hacía sentir incomoda. Vio dos asientos libres en la segunda fila, miro a su amiga y se sentaron juntas.
Poco después llego la profesora y cuando la vio le pidió que se presentase delante de toda la clase, se levantó y así lo hizo, pero la profesora no se fijó en su amiga, así que siguió con la clase.
Por fin acaba el primer día de clase, no había sido tan malo como pensaba. Sus compañeros eran amables y ya la habían invitado a una fiesta esta noche. Se despide de Laura y se va corriendo a casa para prepararse para esta noche, es la primera vez que le invitan a algún sitio.
Por fin son las siete, para Andrea, esta tarde había sido más larga de lo normal, o eso le parecía a ella. Llega a la fiesta y pregunta por su amiga Laura. Sofía, la anfitriona, le responde que no ha invitado a ninguna Laura, así que Andrea asiente y entra en la fiesta esperando que su única amiga no se enfade.
Al día siguiente se encuentra con Laura de camino a clase. -¿Dónde estuviste anoche? Te llame a casa pero tu madre me dijo que no estabas-. No podía ser cierto, nunca le llama a casa pero justo el día que va a algún sitio sin ella tenía que llamar.
-No te enfades pero fui a una fiesta que daba Sofía, pensaba que tú también ibas.
-Andrea, soy tu amiga, no me voy a enfadar por eso, unos días te invitaran a ti y otros a mí, no pasa nada.
Andrea se alivia al oír eso, sin duda Laura es la mejor amiga del mundo
Llegan a clase y Sofía se acerca a saludar a Andrea, le piden que se siente a su lado, mira a su amiga y ella le hace un gesto para que vaya. A la hora del recreo Andrea busca a Laura pero no la encuentra y piensa que se habrá ido a casa, igual se encontraba mal.
Al día siguiente Laura tampoco apareció por clase, parecía estar realmente mal, así que Andrea decidió pasar el día con Sofía. Pasaron los días y Laura seguía sin aparecer, suerte que estaba Sofía para sustituir a Laura, no era lo mismo pero se llevaban bastante bien y se divertía mucho con ella, se podría decir que Sofía y Andrea ya eran oficialmente amigas.
Desde entonces, Andrea no volvió a ver ni a pensar en Laura.
AnaE
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Mi mejor amiga
Short StoryNueva vida, nuevo insti, nueva clase, pero siempre de la mano de mi, ¿mejor amiga? Por AnaE