Fue sólo un típico día como otros, pareciera como si las nubes reflejaran un tono de dolor y sufrimiento, eran totalmente negras pero nadie sabia lo que pasaría después ya que lo mejoraría todo. Una mañana de 17 de octubre un chico de tez morena y ojos caféses se dirigía hacia un lugar donde no sabía que encontraría a una chica que lo haría feliz por el resto de sus días. La chica simplemente era perfecta, sus sonrisa reflejaba un tono de felicidad cada vez que la veía, su mirada enloquecería a cualquiera. Sólo fue hasta que se miraron fijamente a los ojos y sabían que eran el uno para el otro. Ella tiene una sonrisa que se parece a la mía. Después de eso su tiempo término, se hacia de noche pero los dos sabían que no les importaba. Ella fue causante del primer beso, lo mejor de todo fue que lo que buscaba es chico en alguien era amor y lo encontró con ella. Tal vez se vuelvan a ver dentro de poco pero el amor que se tienen no los separara jamás.