Keep you ; kellin quinn [iych #1.5]

V (1/3)

¿Leyeron el título aquí arriba ↑ verdad? Seeeee, es maratón, así que comenzaré desde ya con las amenazas de secuestro si no votan, sus madres y gatitos están en peligro. [Estaré vigilando detrás de sus cortinas] Nah, sólo es una broma inocente que no es para nada cierta...

Tal vez.

¡Ahora a leer!

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"La paciencia es mi enemiga, el amor es mi amigo. Es más difícil irme con el corazón en la manga que quedarme y solo fingir".

: : C A P Í T U L O    C I N C O | Plástica subnormal

(Kellin)

Mis manos revolotearon en mi celular mientras deslizaba uno de mis dedos por la pantalla en la galería de fotos para revisar si lo que había vivido esta serie de meses pasados fue real y no un sueño. Imágenes de Megan durmiendo, sonriendo o simplemente estando distraídas abundaban en el álbum especialmente dedicado a ella, con su nombre escrito en letras mayúsculas. Sé que es un poco psicópata tener un álbum dedicado a ella con más de trescientas fotos, pero sólo puedo decir en mi defensa que la extraño constantemente. Había una fotografía en particular que me hizo detener mi búsqueda.

Ella estaba recostada en su almohada color rosa -sí, color rosa, ¿lo puedes creer?- después de haber sido amada, en la que dormía con una cara relajada y sus mejillas estaban ruborizadas en un tono por encima del rojo suave.

Perfecta, diría yo.

Mi corazón se apretó mientras acariciaba la fría superficie de mi celular esperando revivir ese día.

Dios, es cierto que estaba en un infierno antes de que Megan entrara en mi vida, pero era un infierno fácil de vivir. A veces me pregunto si los conflictos que ahora paso serían más llevaderos si no tuviese que esconderlos constantemente de ella.

Y luego mi cobardía asoma su cara y mis dudas vuelven al baúl en el que se mantienen presas.

- Oye - susurró una conocida voz masculina a mis espaldas distrayendo mi concentración de la imagen en mi teléfono. Los músculos de mi espalda como por acto reflejo se tensaron ante el sonido de su murmullo -. ¿Qué haces?

Apreté los dientes para no responder algún insulto que estaba en la punta de mi lengua.

Metiendo mi pie en tu trasero, imbécil.

- Nada, estaba revisando algo - dije con la voz más indiferente que llegué a transmitir.

- Oh - él posó una mano en mi hombro antes de que tuviese tiempo de evitar su contacto -. ¿Te ibas a juntar con una chica hoy, e interrumpí tus planes? - preguntó con duda.

- No - respondí más bruscamente de lo que me proponía -. No hay ninguna chica - tuve que obligarme a mi mismo a mirar el suelo para que él no percibiera la mirada de odio contenida en mis ojos -. ¿Por qué? ¿Qué quieres? ¿Que hable acerca de eso contigo?

Él se removió en su lugar, lo supe por el sonido que sus intranquilos pies hicieron en el piso.

- No, yo... sólo quería saber. No pensaba ayudarte.

- Tampoco es como si fueses el mejor ejemplo ¿verdad? - cuestioné quitando su tacto de mi cuerpo al encoger mi hombro. No soportaba el contacto entre él y yo por más tiempo que el necesario -. No respondes ahora. Genial.

Él aclaró su garganta.

- Te estaba buscando. Iba a pagar la cuenta para poder salir.

- Seguro - contesté volviendo a ver la imagen de mi novia en el celular -. Ya tenía ganas de irme a casa.