A La Mexicana. (RESUBIENDO)

Capítulo Cuarenta. "FINAL"

10 años después de la muerte de Arturo.
-¡papá!.- grito Isabel entrando a la habitación en donde el dormía aun de forma pesada, con una pierna colgando en el aire y un brazo doblado.

Ella sonrió de forma burlona, tomo su teléfono que había estado descansado en la bolsa izquierda de su pequeña suéter e hizo el intento de tomar una fotografía.

-ni se te ocurra.- murmuró Francisco con la voz ronca, tomo una almohada y se la lanzó al rostro a su hija.

-como sea, mamá dijo que ya no estés de huevon y que me lleves a la escuela, y al enfadoso de Nicolás también.

Francisco suspiro, se sentó en la cama y paso la sábana por su cadera, cubriendo su ropa interior de su hija.

-ya voy, esperenme abajo.- Isabel asintió y se fue corriendo, Francisco sonrió y se dejó caer en la cama.

Se puso un short aguado blanco y una camisa gris de arco, bostezo, se estiró un poco y se lavo muy bien la boca.

Bajo con muy pocas energías las escaleras y un bichito llamado Nicolás le salto encima, Francisco sonrió y revolvió el cabello.

Sofía apareció con una gran sonrisa y algo en el estómago, Francisco giro la cabeza hacia la derecha y sonrió de manera divertida.

-¿esa cosa seguirá creciendo?.-pregunto, ella lo miro de mal manera, pero se acercó a el y dejo un leve beso en sus labios.

-claro que si, después de dos hijos, no puedo creer que no recuerdes eso.- murmuró dando leves palmadas en su mejilla.

-ya, han pasado doce años no me acordaba.- Isabel gimió de forma lastimosa y señaló la puerta.- ya me voy, que la señorita anda loca por irse.- Sofía asintió, se despidió de sus ojos y miro a Francisco caminar hacia la puerta.

El tomo la mochila de ambos y caminaron hacia afuera de la casa, como siempre, Isabel corrió y tomo el asiento de copiloto, Francisco rodó los ojos, Nicolás subió en la segunda cabina del pick up y Francisco encendio el auto.

Nicolás saludó a los guardias de la puerta junto con Francisco y así salieron rumbo a las escuelas, Nicolás escuela primaria e Isabel escuela secundaria.

No tardaron mucho en llegar al colegio de ellos, así que, Francisco se despidió de ambos, les dio su dinero, Isabel salio corriendo pero Nicolás si se despidió de su padre.

Francisco bostezo, rasco su cabeza y condujo de nuevo a casa, aunque debía bañarse para ir a trabajar, pero el solo quería quedarse en casa con Sofía, pero claro, Ignacio andaba de malas y lo obligó a ir a trabajar.

Cuando llegó a casa, los guardias estaban desayunando, les dio de nuevo los buenos días y entro, estacionó el auto y bajo.

Entro a la casa, Sofía le sonrió sentada en la mesa desayunando. Se tumbó en la silla frente a ella y le dio un leve roce en la mano.

Ella levanto la vista y le sonrió, pero el mostró su lengua.

-vamos a comer como personas normales.- murmuró ella sonriendo, el se encogió de hombros y tomo un par de quesadillas.

Comenzó a morderlas, sintiendo el queso derretido junto a la tortilla de harina explotando en su boca.

Sirvió café en una taza, le puso azúcar y leche pero espero a que se enfriara un poco. Siguió comiendo sus quesadillas y tomo un poco de fruta picada que estaba en el centro.

-¿quiere ir a cenar conmigo esta noche hermosa mujer?.- pregunto el, Sofía sonrió de forma abierta mostrando todos sus dientes, había un leve rubor en sus mejillas.