Enamorando a Verónica → zayn

44. Gato encerrado.

-Aquí hay gato encerrado, Bonnie -opinó el castaño- Él puede ser estúpido, y tomar mas desiciones a veces, pero, sé perfectamente que Zayn jamás te diría algo así, por más enojado que estuviese. Quizás está bromeando...

-Liam, ¿crees que si supiera que estaba jugando, estaría así?

Liam miró con pena a su amiga, de verdad estaba realmente mal.

-¿Y si, no sé, escuchaste mal? -preguntó el más alto, aún sabiendo que sería imposible.

-Dejen de defenderlo. Escuché perfectamente lo que dijo, él me odia -sollozó-. C-creo que esta vez sí debo irme, y, no volver -susurró- El error fue mío en querer venir aquí, con la falsa esperanza de que todo iba a estar bien.

-¡No! Habla con Zayn, con su madre, si quieres nosotros te acompañamos, pero, por favor, no te vuelvas a ir. -rogó el rizado, al borde de la locura.

-No insistas, Harry. Ya entendí que yo no pertenezco a este lugar, mira, hablaremos por videochat, esta vez sí estaremos en contacto -intentó sonreir, sólo sacó una mueca- Ustedes me visitaran, cada vez que quieran, sólo llamenme y tendrán donde dormir. Pero, chicos, no prometo volver, porque sería como esperar un barco, en un aeropuerto.

-Bonnie... -susurró Liam.

Bonnie sonrió, intentando animar a los dos chicos a su lado. Ahora, se veían mucho más tristes que ella, pero eso era lo que Bonnie no quería, esa era la razón por las que odiaba las despedidas.

Ella, sinceramente, no quería que sus mejores amigos estuvieran tristes por su culpa.

-Esta sí es la despedida -sonrió con ironía-. Hasta que vayan a Nueva York, ustedes se quedaran en mi apartamento, para ese tiempo espero haber superado a Zayn -suspiró-. Ordenaremos pizza, veremos películas, conoceran a mis amigos. ¿No suena bien eso?

-No, Bonnie, esta no es la despedida. Te prometemos que llegaremos al fondo de esto, pero es importante que sepas que Zayn te ama, él de verdad lo hace. Sólo que, es un idiota. -susurró Harry.

Bonnie asintió, aún con los ojos llorosos.

Se acercó a los dos chicos, y los envolvió en un fuerte abrazo, mientras manchaba sus camisas con lágrimas. No sólo lloraba porque el amor de su vida no le correspondía, lloraba por el hecho de que se iba a ir de su hogar, y esta vez, no iba a volver.

De eso, ella estaba segura, no iba a volver.

Liam suspiraba, al mismo tiempo que luchaba por contener las lágrimas en sus oscuros ojos, cosa que no consiguió, debido a que cuando buscó los ojos de Harry, estos estaban empañados en lágrimas.

-No tienen por qué llorar, a ustedes no les rompieron el corazón -murmuró con melancolía- Liam, despídeme de Danielle, espero volver a verla, si es que me visitan algún dia, ni siquiera tendrán que preguntar, sólo lleguen y yo los recibiré -sonrió-. Los quiero, amigos, y gracias por todo.

Luego de eso, una triste chica entró a su casa, derramando algunas lágrimas que ella se encargaba de secar.

Cuando Bonnie ya estuvo dentro, Harry y Liam intercambiaron miradas.

-Esto está mal. -habló Liam, luego de un breve momento de silencio.