Me acabo de levantar después de no recordar, ¿nada? básicamente, de la noche anterior. Obviamente recuerdo que me lo pasé de puta madre pero si paramos en detalles... Desbloqueo el móvil y veo que son las 12:43 y creo que es hora de levantarme y levantar a Nadine. Al destaparme veo que aún sigo con la ropa de ayer, la miro con reparo y pienso que a lo mejor no sólo yo soy la que necesita un centrifugado en la lavadora, o en la ducha. Entro en Instagram y subo una foto de ayer, después de mirarme todo el historial. No sé, es una manía. Sí, la gente se lava la cara, se ducha, desayuna, arregla su habitación y luego ya si eso coge el móvil, pues yo no. Yo me veo todo el historial con los ojos entrecerrados. Decido levantarme, por fin, y de paso, tirarle un cojín a Nadine, a ver si resucita. Nadine por lo visto decide seguir en su camino al homicidio y decido meterme en la ducha y pasar de ella y de su momento de estado crítico. Estoy exagerando, pero es gracioso por que siempre duerme con los ojos entreabiertos y en blanco y a veces parece que ni respira. Da tanto miedo, que mola.
Al salir de la ducha veo que mi parte está desordenada como recién la dejé, pero la de Nadine está totalmente arreglada y con ella encima con el móvil en la mano. Reviso bien la habitación y no, no hay ningun error, la hija de puta sólo ha arreglado su cama.
-¿Resucitas de mal humor o eres tan cabrona como estoy pensando?
-¿Qué? ¿Qué quieres que te arregle tu cama o qué? Pensaba que tenías una edad ya eh Sara... me decepcionas. -dice fingiendo- Qué mal te hemos criado tu padre y yo.
-¿Ah, sí? -digo en una risa ahogada- ¿me recuerdas quién es mi padre? Es que se me olvida sabes -decido seguirle el rollo.
-Ay, te entiendo cariño, ven aquí, es que tu padre está tan liado de partido en partido que apenas puede venir a vernos, luego le hago una llamadita y hablas con él -me guiña un ojo.
-Ah, es verdad, por eso estás tan resentida, gruñona y antipática. -le digo entendiendo que se refería a nuestro platónico Fernando Torres, mientras ésta se hace la ofendida y me tira la botella de agua que tenía en su mesita de noche- DESESPERADA -grito al sentir el impacto de la botella RELLENA en mí, por lo que duele más.
-Arréglame la puta cama, criada de mierda, que me voy a vestir -le grito bromeando mientras empiezo a cambiarme. Delante suya ya que la verdad, yo nunca he tenido ningún inconveniente en estar como dios nos trajo el mundo, como dice mi madre, no como otras que tienen que encerrarse en el baño y cerrar las ventanas por si a alguien se le escapa el privilegio de verlas en bragas.
Justo al terminar de ponerme el pantalón corto de deporte rosa palo, entran por la puerta Pablo y Jordi. Espera, ¿Pablo? ¿Mi hermano? Ups, ¿se me ha olvidado recordarte que venían tus padres hoy? -me repite mi conciencia. Bueno, a lo que ibamos, mi hermano está aquí junto con el hermano de Nadine, Jordi, los dos de la misma edad, con lo cual mis padres y los de Nadine estarán fuera, con lo cual esta es mi última noche con Nadine. Con lo cual, vaya mierda.
-Sara, no te recuerdo tan mayor -dice Jordi pasando su brazo por mis hombros, llamando mi atención.
-Jordi, que tienes novia -le recuerda Nadine, riéndose
-Estoy abierto a conocer a gente nueva, Nadine -dice bromeando, o eso creo- ¿Qué tal guapa? -dice esta vez refiriendose a mi.
-Quita que me voy a peinar -digo riendome
-Ese rechazo me ha dolido hasta a mi -dice mi hermano, cómo no, metiendo mierda. Al acordarme de mi hermano no tardo en ir corriendo a abrazarlo, mi hermano es un año mayor que yo y la verdad, es tan guapo que si no fuera mi hermano...
Después de saludar a todos los padres, mis padres me acaban de explicar así dejandomelo caer que nos venimos aquí a Barcelona. A Barcelona, repito. A vivir. Canet.
-¿Qué? -repito anonadada.
Al parecer, mañana volvemos a Málaga a recoger las cosas para la mudanza, nos quedamos el fin de semana ahí y básicamente el lunes estaremos aquí de vuelta.
La verdad es que necesitaba un cambio de aires, pero ¿tan brusco?. Dicen que seguiremos teniendo nuestra casa en Málaga, pero que prefieren Barcelona ya que todo está mucho mejor. Sí, Barcelona económicamente está mucho mejor, pero Málaga es Málaga, es mi Málaga y me va a costar la vida dejarla. Más me costaba irme a Cádiz los veranos imagínate fuera de Andalucía. Es que no, mi sitio está en Andalucía- Os imagináis yo hablando catalán o yo sin la feria de Málaga, sin el Rocío, sin la Virgen del Carmen, sin Semana Blanca, sin la vendimia... sin mi Málaga la bella. Sólo imaginarme viviendo aquí ya me agobia. Supongo que volveremos los veranos y algunas vacaciones por que todo lo que tengo lo tengo allí, mis abuelos, mi casa, mis amigos, mi familia en sí, pero ya no será lo mismo. Al parecer mi hermano o está encantado o lo sabe esconder muy bien, por que no dice nada y sólo dice lo mucho que va a salir por Cocoa y por las discotecas de Barcelona con Jordi, lo mucho que va a ligar y la de tías que habrá. Y Barcelona no está nada mal, pero mi corazón siempre lo tendrá mi Málaga y mi Andalucía. Ahora mismo sólo puedo pensar en la de cosas que tendré que dejar atrás, contando al equipo de baloncesto, a mis amigos, mi instituto, mi pueblo y a Kike. Aun que siempre digo que a él ya le tengo muy atrás en el pasado, no me puedo engañar a mí misma y más ahora, que me voy y no me voy a poder despedir de él. La verdad es que me gustaría verlo por última vez, decirle que le perdonaba las mil y una cosas que me ha hecho a lo largo del año en el que estuvimos, aun que no sea del todo cierto, decirle que le quiero y que me quedaría ahí por él, pero no puedo. Hay una parte de mí que está cansada de él. De que la cague y vuelva. Y sobretodo de que sepa que siempre tendrá lugar en mi corazón. Eso es lo que más coraje me da, que lo sepa y que eso le de pie a cagarla y saber que siempre me tendrá. Y aunque la última vez que lo dejamos le dije lo harta que estaba y que no le quería ver más, que fue muy creible aun que no del todo cierto, ahora mismo si me diría ven, voy.