Capricho rojo.

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LA BRUJA SIN NOMBRE

La bruja sin nombre se había pasado toda la mañana buscando y probando los últimos modelos de los deportivos más caros, ostentosos y rápidos, le apasionaba la velocidad, cuando tuvo decidido con cual quedarse, le dijo al empleado que lo quería de color rojo, su color favorito, y aunque estaba impoluto de limpio pidió que volvieran a limpiarlo, mas bien exigió, estaba acostumbrada a tener todo lo que quería, y muchas personas quedaban casi hipnotizadas por sus grandes ojos verdosos y a pesar de no querer hacer lo que les pedía, terminaban obedeciendo, después no recordaban nada de lo que habían hecho, no debían hacerlo.

El consejo de las brujas ancianas era muy severo, ya que las nuevas generaciones cada día daban más problemas, y eso ponía en riesgo milenios de existencia y convivencia con los humanos. Una de las normas, es que si utilizaban sus poderes con alguna persona, debían borrarles de la mente todo lo ocurrido con ellas. Uno de los grandes problemas con los que debían lidiar casi a diario, era el tema de volar con las escobas o super escobas veloces, últimos modelos que iban a velocidades vertiginosas, imaginaros ir tranquilamente y de repente oír un gran ruido por el cielo, alzar la vista y encontraros con algo que os deja perplejos, tal vez a esa velocidad no os de tiempo a ver realmente nada, pero con la cantidad de móviles con cámara de fotos que la gente tiene, puede ocurrir que capturen una imagen, y seria un peligro. Lo que ocurría es que las brujas jóvenes se olvidaban de poner en modo silencioso e invisible las escobas, otras veces les gustaba asustar y reírse de los humanos, por eso el consejo prohibió que se utilizaran de día, la que osara hacerlo se quedaría un año sin su escoba, y no os podéis imaginar la cantidad que tenían ya acumuladas en una gran habitación por culpa de desobedecer a las sabias ancianas.

Por ese motivo, la bruja roja, por el día utilizaba sus coches, tenia varios, todos rojos por supuesto. Su pasión por la velocidad tal vez fuera debida a que cuando estaba a punto de nacer, su madre que no esperaba su llegada hasta dos meses después, tuvo que ir rápidamente en su escoba en busca de la comadrona de las brujas, al encontrarla en su cueva dio un sonoro suspiro y la bruja sin nombre vino al mundo, por segundos no llego volando y a cientos de kilómetros por hora.

Eso fue lo único que le contaron de su madre, y cuando preguntaba por ella las otras brujas cambiaban de conversación, de su niñez recordaba muy poco, nunca se sintió querida por ella, solo una vez la abrazo, jamás le dio un beso y si la bruja sin nombre intentaba dárselo, su madre se sentía incomoda y termino por dejar de hacerlo. Un día que estaba sola jugando en casa, llegaron dos brujas y le dijeron que debía marcharse con ellas que su madre no volvería, no le dieron más explicaciones, no hecho de menos a esa señora que nunca fue cariñosa con ella, y se adapto bien a las dos hermanas brujas que la cuidaron y ayudaron a convertirse en la bruja que se había convertido. Pero nadie recordaba su nombre, por eso la llamaban la bruja roja por su largo pelo pelirrojo o la bruja sin nombre.

Cuando salio del concesionario de coches, y veía como la miraban al pasar con su gran cochazo, su ego subía por las nubes, al despertar tanta envidia en los demás, hacia que tuviera mas poderes, así se alimentan los seres oscuros, de las malas acciones o de los malos sentimientos de las personas.

La bruja sin nombre tenia ya muchos siglos de vida, y para poder seguir siendo joven cada cien años debía encontrar varios niños y darles un pequeño empujoncito para convertirlos por un día, en niños malos. De ese modo seguiría siendo joven un siglo más.

Ahora que se acercaban las últimas semanas para el gran día debía darse prisa en elegir a los nuevos niños de luz, tenia que encontrar varios niños especiales, y de cada uno convertir su lado bueno en malo. Todos nacemos puros, con una inocencia que con el paso de los años, y según la vida y personas que con las que hemos convivido, ya sean nuestra familia, amistades, pasamos por momentos en los cuales nos veremos en situaciones donde obramos bien o mal,

Habrá situaciones donde obremos mal pero ese hecho no tenga mucha importancia o que incluso nos arrepintamos y pidamos perdón. Pero otras donde con un acto nuestro hagamos sentir dolor a una o a varias personas. Durante todos los siglos de vida que tenía la bruja, siempre había conseguido sacar el lado oscuro de los niños que raptaba, algunos eran niños con una gran bondad, otros que se dejaban llevar por otros niños para no sentirse rechazados, y aunque no querían hacer lo que los cabecillas hacían, terminaban comportándose de forma mala.


2º Capitulo.

La bruja roja llevaba varias semanas acechando a sus futuras presas, sabia por anteriores experiencias que debía atrapar a varios niños, siempre más de la cuenta, porque muchos de ellos en el ultimo momento se arrepentían, lloriqueaban y pedían a gritos que les dejara marchar, y desde luego eso era algo que no soportaba, por muchos siglos y siglos que transcurrieran, odiaba a esos seres pequeños tan fáciles de engañar en un principio y tan cambiantes cuando ya pensaba  que eran totalmente suyos.

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⏰ Última actualización: Oct 24, 2016 ⏰

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