La playa de San Andrés se vestía con muchas palmeras, su mar le llamaban El mar de siete colores, en el agua flotaban votes turísticos con dibujos de personas de color -hermosos-
Había una gran cantidad de pobladores que vendían desde agua hasta vestidos de baño, lo que mas se me antojo fueron los frutos de su mar, saborie algunos mientras estábamos en la playa, pedazos pequeños de coco endulzados con panela, así se le llama a ese bloque color café hecho de caña de azúcar madura -Fue deliciosa la cocada-
-" Deliciosa tierra"- le comenta mi padre y Margaret. Ellos estaban junto a nosotras pero me preocupaba que ya habían pasado dos horas y Zac nada que salía del hotel.
-"iré al Hotel por mi teléfono"- les informé. Mi padre me miró
-"Cariño. ¿Puedes decirle a Zac que venga?"- me pide Margaret
-"Esta bien -sonreí- Le diré"- le conteste mientras me levantaba de la arena para después con las manos sacudirme para remover la arena que cubría mi trasero. No me había metido al mar pero quería hacerlo cuando regresara.
Camine unos metros hasta el Hotel
Cuando entré a la habitación Zac estaba viendo televisión mientras comía algo en una taza
-"¿Que tal el mar?- me pregunta mientras mastica, pero no quitó la mirada de el televisor.
Me le acerque
-" Margaret pide que bajes y veas el mar. No viniste a San Andrés a ver televisión" - le regañe, pero ¿saben? me ignoro y siguió mordiendo la tajada amarilla
-''¿que estas comiendo de ese plato?''- le dije mientras veía esos bananos aplastados
-"me dio hambre -Sonrie- Se llaman patacones, son deliciosos. ¿Quieres?"- me pregunta.
Se veían y olían muy bien, mi cerebro dió un impulso y con mis dedos saque una de su plato le di el primer mordisco; eran crocantes y la sal les daba un toque único.
Tome mi teléfono de la mesa de noche
-"¿vienes?"- le pregunte
-"mas tarde"- afirma el. Era obvio que no bajaría, no podía creer que alguien quisiera quedarse en un cuarto de hotel antes de salir y nadar en un mar tan hermoso
-"¡Acaso! -Toríe- ¿Zac Sheedran no sabe nadar?"- dije bromeando pero su silencio me hizo sospechar que era verdad- "¿No sabes nadar?"- repetí.
-"No precisamente ¡Antonia!"- Por fin gira y se digna a mirarme.
-"¡Vamos Zac! -le aconseje- No hay problema, todo en esta vida se aprende"-
Después de tanto insistir y de Terminar sus tajadas, como se llamaban, oh sí, patacones, se puso de pie para salir junto conmigo hacia el mar.
Ya estaban todos dentro del mar, yo estaba quitándome la blusa para meterme al mar pero me recordé de lo pequeño que era el vestido de baño, así que me deje los shorks y entre al mar. Corrí hacia Licia pero Zac no me siguió, me gire y permanecía allí.
-"Entra"- le pedí
-" No lo se"- rechaza también con su cabeza.
De nuevo tuve que volver a insistir, insistí tanto, tanto, pero tanto, que asedio finalmente, entro al mar para estar junto a nosotros.
Margaret y mi padre estaban un poco serios conmigo por que estaba muy en confianza con Zac pero Licia también estaba allí haciendo lo mismo que yo. Después de que Zac bebido tanta agua aprendiendo, aprendió a nadar al final ya hacíamos carreras de quien llegará primero a unos cuantos metros. Almorzamos pescado, arroz con coco., patacón, yuca,ñame y de postre maíz; quede muy satisfecha con ese almuerzo y no me dio hambre asta la noche. No regresamos al Hotel hasta la noche para cambiarnos la ropa mojada, después de que nos cambiamos la ropa mojada fuimos a una fiesta que organizó el Hotel para los turistas
Era en la playa; se escuchaba música a base de trompetas, creí que era la llamada salsa. Había mucha comida de mar, cervezas,limonadas, y postres de maíz. A esta fiesta fuimos todos, ninguno se quedo en el cuarto del Hotel, como no sabíamos bailar aquella música, nos quedamos sentados en una mesa hasta que un hombre alto, de piel negra, ojos verdes, cabello afro y contextura musculosa se acerco a la mesa y le pidió a Licia que bailaran, el hombre hablo perfectamente el ingles, en algún libro he leído que la mayoría de pobladores San Andrésanos son bilingües. Licia se negó, entonces aquel hombre me pidió que bailáramos. No sabia que hacer, que decir, ademas con las caras de Zac ,mi padre,Licia y Margaret mi cerebro se puso nulo.
-" pero.. No se bailar salsa"- admito
-" vamos. Aprenderás del mejor"- presume
-" esta bien"- me levante de la silla y camine junto al hombre, me enseñó mucho;hacia adelante o hacia atrás, o de manera lateral. En el cuarto tiempo se hace una pausa. Luego se repite la misma secuencia en la dirección opuesta.En algunos estilos de salsa, como en la Salsa en 2, el primer paso se ejecuta en el segundo tiempo del ritmo. La pausa se hace en el primer tiempo.A nivel básico, lo más importante es aprender a realizar el cambio de peso que requieren estos pasos y ejecutar el cambio de dirección con fluidez.Baile, baile y baile.
-" Soy Luis"- dice el hombre
-" Toni"-
-" Eres inglesa.¿verdad?"- pregunta. Ni siquiera alcance a contestarle por que Zac interrumpió.
-" Me permite bailar con Antonia?"- le pide Zac a Luis
-" Claro" "un placer en haberle enseñado un poco de mi país Señorita"- termina diciéndole Luis
-" Gracias"- le agradecí.
Zac tomo mis manos,yo de nuevo enseñándole pero esta vez a bailar Salsa, se le dificulto mucho, era muy tieso, en ves de bailar salsa parecía que estuviera partiendo las caderas, fue muy gracioso.Pero después de una hora parecíamos dos Colombianos mas bailando Salsa.
A la mañana siguiente fuimos a un pequeño tour por la Ciudad; una de las cosas mas bellas fue ir a La Loma,la iglesia con su techo rojo, y paredes blancas.
-''Antonia.¿Te gustaría casarte aquí, en esta iglesia''-pregunta Zac
-''Es muy hermosa,me gusta''- le dije. En la tarde debíamos viajar de regreso a Londres, pero antes le compre una manilla a mi madre en una plazoleta artesanal en el centro de San andres.
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PASOS
RomanceAntonia Smith es una joven de 17 años. Ella Vivió con su madre al occidente de la ciudad de Bradford en Inglaterra, fué hija de Dayan Martínez y Shed Smith, una pareja divorciada. Cuando terminó su bachiller se marcho con su padre hacia Londres Para...