Regalame tu corazón

Capitulo 1

Ya terminaban las vacaciones y al día siguiente debía volver a la escuela así que aproveche de descansar un poco y disfrutar los ultimas horas en casa de mi mejor amiga .

Al llegar a su casa me encontre que estaba bastante peor su situación, ya ni tenian muebles producto de las ventas de jardin que debían hacer casi todos los fin de semana para pagar las cuentas, que al igual que había hecho mi padre el suyo los abandonó con muchas cuentas sin saldar.

La mamá de mi amiga trabajaba de sol a sol, ya ni la veía y eso me apenaba mucho, porque la estimaba demasiado.

Toque el timbre y abrio Ian, au hermano. Era muy guapo y tambien un buen amigo. Al verme me abrazó y beso ambas mejillas de una manera muy efusiva.

"Hola guapa" me dijo mirandome completa, "Hola guapo" le repeti seria se veia realmente bien con un sweter y jeans.

"y ¿Amanda? pregunte buscandola por todas partes. "Ven sigueme" m dijo triste, porque no iba a visitarlo a el. Para cambiar su expresión le bese la frente con mucha ternura e inmediatamente en su rostro se dibujo una sonrisa.

Encontre a Amanda, con el cabello negro y sus ojos claros fijos en la ventana de su habitación mientras acariciaba a Sussi, una gatita blanca que pasaba por su casa cada día.

"Psss" susurre para llamar su atención. Amanda al verme corrio a besarme las mejilla. Aún estaba en piyama.

No nos veiamos desde que empezaron las vacaciones porque yo había viajado con mis abuelos y ella no aceptó ir para no dejar a su hermano solo.

"¿Conociste a un chico en la playa?" negue tristemente con la cabeza. Jamás había tenido novio y antes era muy codiciada por los chicos pero ahora que estaba decidida a tener un novio,obiamente no cualquier chico, parecia que ya nadie se fijaba en mi.

"Son unos idiotas" dijo friamente a la vez que Ian entraba a la habitación y me abrazaba por detras. "Ian dejala" grito Amanda al ver que mis mejillas ardian y parecian dos manzanas, Ian en cambio me cogio como un paquete y me llevó a su cuarto. Yo estaba de lo más divertida oyendo los gritos de Amanda, mientras que Ian cerraba la puerta divertido y se sentaba a mi lado.

"Y....vamos que has hecho" dijo animadamente. "Mm......te extrañe estupido, no me llamaste" fingi estar molesta. "Vamos no seas tonta tambien te extrañe" puso un mechon de cabello detras de mi oreja y aproximo sus labios a los mios. Me presiono contra el sosteniendome de la nuca, pero yo me resisti, no podia el era más fuerte.

"Ian" dije intentando alejarlo, el se alejó y se burlo de mi. No entendía que sucedia, el continuaba riendo cuando lo golpee en el hombro " ¿que es tan gracioso?" dije molesta, "pues tonta solo jugaba" volvia a reir, de verdad los hombres eran unos idiotas.

Sali de su cuarto y hable de todo con Amanda, omitiendo el hecho de que Ian había jugado conmigo, de seguro ella lo mataria.

Cuando llegó la noche me despedi con un furete abrazó y me fui a casa. Al llegar no pude evitar caer rendida en la cama, debía descansar.

Desperte alamarda por el despertador, a regañadientes apague el botonsillo y fui al baño. Tome una corta ducha de agua fría, para ganar animo, era lo que más nesecitaba aquella mañana para empezar el primer día de clases. Salí del baño increiblemente recuperada del sueño, tenía que tener un día fantastico y comenzar todo bien, estaba segura de eso.

Fui al espejo de mi cuarto y me puse unas capas de rimel y me peine mi problematico y alborotado cabello naranjo, que me llegaba hasta la cintura y era un gran problema peinarlo cada mañana. Ya lo había cortado un par de veces, solo un poco para que mamá no se diese cuenta, pero si lo volvía a hacer de seguro me asesinaría con sus propias manos.

Estaba tan animada que decidi ponerme sexy a ver si ese año me iba mejor y conseguía novio, una blusa de tirantes rosa, una falda negra corta y tacones de aguja, pero no pude evitar soltar sonoras carcajadas al verme vestida de esa manera, me parecia a la perra de Jessica.

Ahora un poco más apresurada me puse unos jeans oscuros, una blusa floreada y mis amadas convers. "Esta si soy yo" pense satisfecha al verme al espejo.

Fui hasta la cocina y saque una manzana y un paquete de chicles. Estaba sola, mamá y Peter, mi padrasto al parecer habían vueltp a escapar solos para tener un día de diversión, cosa que me alegraba, mamá nesecitaba ser feliz luego de sufrir tanto por mi padre.

Cuando salí de casa corrí a tomar el autobus que por poco se va. Otra vez como cada día, apestaba a cigarrillos y un grupo de pervertidos miraban a una mujer que intentaba amamantar a su bebe disimuladamente ante la mirada de todos una viejecita le hizo una señal para que se tapara y ella le obedeció sonrojada hasta las orejas. "Una pesadilla" pense y me sente en el último asiento.

De repente un chico muy guapo se sentó a mi lado, era palido, ojos verdes y perfectos, con una mirafa felina y su hermoso y despeinado cabello azabache.

Lo miraba disimuladamente, su polera simple y blanca se aderia a su cuerpo atletico, llevaba jeans y tenis oscuros, se veía muy sexy.

El dio la vuelta al rostro para dirigirse a mi. Me tendio la mano "Alexander" dijo con una suave sonrisa en la comisura de los labios.

"Samantha" dije separando mi mano y devolviendole la sonrisa.

Al rato le ofrecí de mis chicles y el acepto con un timido "gracias". No cruzamos palabra en todo el viaje, pero nuestras miradas se encontraron un par de veces, totalmente nerviosos y sonrojados.

Cuando el autobus de detuvo me baje y para mo sorpresa el se bajo conmigo. "¿Me estas siguiendo?" le pregunte con desconfianza el nego con la cabeza y continuo detras mio hasta el British School, en el portal de la escuela me detuvo.

"Me ayudarias a buscar esta sala" dijo sacando un papel arrugado de su bolsillo. Lo mire desconcertada y lo dirigi a su sala, mi aula.

Apenas hubimos abierto la puerta todas lad estudiantes del salón voltearon a mirar al chico sexy que estaba a mi lado.

Ese si que iba a ser un día interesante......

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