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   Sentía una presión enorme en mi pecho, ¿así se siente un infarto? Apuesto a que sí. Sentí que me arrojaron una cubeta con agua helada en la cara. Aceptaba y entendía menos de la mitad de las cosas que estaban sucediendo, ¿están sucediendo en realidad? ¿En que estúpida historia se les ocurriría ponerme como "semi brujo"?, mi madre una demonio, conocer ángeles reales, etc, etc, etc. Pero ella, ella no lograba salir de mi mente, ella y Collin hablando. ¿Era justo pensar en Crystal con todo lo demás que me estaba sucediendo? ¡Claro que era justo! ella era parte del problema. ¿A donde se supone que debería ir? ¿Que debía hacer? Ya tenía claro que era lo que no debía hacer y era ligarme a ese dichoso club, o circulo, aquelarre. ¿Había diferencia?

Salí del cobertizo donde me tenían cautivo, supongo que no había más que decir, yo tampoco quería escuchar más. Unos pasos me siguieron, traté de ignorarlos. Seguí caminando hacia la carretera. Para mi alegría vi venir un taxi de Bluegrass a la distancia. Lo detuve

-¿Es necesario que me persigas?_ le pregunté a Asaliah

-¿Si prefieres que lo haga del otro modo...?

-¡No! Sería lo mismo. Igualmente perseguido. Esto es una reverenda estupidez_ dije a regaña dientes montándome en el taxi. No podía ir a la granja, no quería ver a Crystal en ese momento, quizás en ningún otro. ¿Debía irme de Kentucky? Gran cantidad de cosas sin sentido pensé en la ruta. Decidí ir a casa, tomar unas cosas e irme a quien sabe dónde, necesitaba pensar.

Le pagué al chofer del taxi. Bajé y ayudé a bajar a Asaliah.

-¿Sabes lo que vas a hacer?_ me preguntó inexpresivamente. De alguna forma su presencia me tranquilizaba un poco a pesar de lo extraño que era

-¿Que si sé lo que voy a hacer?_ le pregunté incognito_ ¿sabes lo que voy a hacer? Porque suena a que me voy a suicidar o matar a alguien

-Claro que sé que vas a hacer. ¿Se te olvida que soy tu conciencia?

-¿Mi qué?

-¿Tengo que darte una cátedra sobre que somos los ángeles guardianes? Eres más inteligente que eso, Liam

-Digamos que nadie se te aparece diciéndote que es tu ángel de la guarda. Los ángeles están en el cielo... o donde sea que se encuentren, lo cierto es que no los vemos. Igual los demonios, Dios, Satanás, El Coco, ¿Santa Claus...?_ me di la media vuelta, podría jurar que sonrió ante mi comentario. Alcé la vista hacia la entrada de mi casa y allí estaba ella, Crystal. Volvió la presión en el pecho, acompañado de un hueco en el estómago.

Se acercó a mí, no sabía si correr o quedarme allí parado

<<Quédate, habla con ella. Yo voy adentro a recoger tus cosas>>

¿Era la voz de Asaliah en mi cabeza? La miré a los ojos, me sonrió amablemente y fue hacia la casa, no había situación más confusa. Crystal la vio pasar

-Liam, tenemos que hablar_ decidí desviar la mirada hacia otro lado

<<Cálmate. Sólo habla con ella con la verdad. No le digas que soy un ángel, ni que Miguel y Gabriel están aquí. Desvíala. Dile que no vas a completar el circulo>>

Era muy extraño escucharla con tanta claridad en mi mente

-No va a suceder. No voy a completar el circulo_ la miré de nuevo. Sus ojos eran más azules. No esperaba que le dijera eso

-Lo sabes...

-Sí, ya lo sé todo

-¿Sabes lo de tu madre?

-Sí, lo sé absolutamente todo. No cuenten conmigo para completar el círculo

<<Déjala. Hiérela un poco para que te deje ir>>

La esquivé y caminé hacia la entrada de mi casa

-Por favor Liam. Tienes que escucharme. Te necesitamos_ me detuve_ te necesito_ me di la vuelta para verla

-¿Me necesitas?_ su expresión era triste y suplicante

-Temo por ti

-Tienes a Collin para que te proteja. Supongo que él es más poderoso que yo porque es un "brujo completo"

-¡Oh no! No digas eso. ¿Que tiene que ver Collin en todo esto?

-He visto cómo te mira_ eso era verdad

-Yo no quiero a Collin

-¡Y yo no quiero ser un fenómeno! Al parecer estas cómoda con eso. Collin también, todos los demás también. ¿Piensas que pedí esto? ¿Piensas que me hace feliz verte con Collin? ¡Llevo toda mi maldita vida amándote, Crystal! A pesar que me olvidaste, que hiciste tu vida en la ciudad. Que seas diferente a mí. Tengo una madre que es una amenaza para la humanidad. Yo lidiaré con eso por mi cuenta. Pueden librarse de esa responsabilidad, no es nece..._ corrió hacia mí, me abrazó con un beso en los labios. El corazón quería salir disparado por mi boca, sus labios eran tan suaves, tibios. Tenerla en mis brazos era la sensación más reconfortante que había sentido.

<<¡Liam, para! Esto no los ayuda>>

Abrí los ojos de golpe, dejé de disfrutar sus besos y la separé_ Lo siento, me tengo que ir. Me están esperando

-¿Quién es ella?

-¿Ella?_ vino a mi mente la idea más trillada del mundo_ ella es Asaliah. Estamos juntos y debemos irnos. Me está esperando_ le di la espalda. Abrí la puerta de mi casa y entré cerrándola con mucho cuidado. Asaliah estaba al pie de la escalera esperando. Sentía el corazón en miles de pedazos. Me dolía, quería reventar en llanto

-Era lo mejor_ Asaliah me brindó una media sonrisa. No funcionó

SerpentibusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora