Zero for conduct: Masacre de Octubre

Capítulo 8

Sólo una funda de almohada sucia, con dos orificios al nivel de los ojos y un cordón enrollado alrededor del cuello; un simple trozo de tela escondiendo un rostro seguramente lleno de demencia y deseos de asesinar a sangre fría sin detenerse un segundo a pensar lo que hace. Ese rostro cubierto perseguía a Kyung, con el arma ensangrentada de sus anteriores tres víctimas en mano, acorralándolo, haciéndolo sentir diminuto por no poder defenderse, sumiéndose en el peor temor que pudo haber experimentado jamás y llorando como un niño perdido pidiendo a gritos por su madre o alguien que lo ayudase. Pero unas manos lo sacudían haciendo que viera todo a su alrededor dando vueltas; aquel sujeto frente a él se desvanecía como el humo de un cigarrillo, quedándose sólo en esa oscuridad y en ese silencio tan inquietante. Entonces sintió un picor en la mejilla que se extendía y dolía, seguido por una luz y dos rostros sobre él. Se incorporó de golpe sobre la cama de lo que reconoció era la enfermería, con la respiración agitada y el estómago revuelto. Se llevó la mano a la mejilla tratando de apaciguar el dolor que le dejó el bofetón que alguien le metió.

-¿¡Quién coño me pegó!? – fulminó a Zico con la mirada.

-Yo no fui, fue Ji Hoon – señaló al peli negro – Pero dime Kyung ¿Cómo estás?

Kyung relajó el rostro adoptando una expresión seria en donde se podía percibir temor y bajó la mirada sin decir nada.

-Viste...

-No, no vi nada – se adelantó a decir – Sólo vi...-Tragó grueso –...Como un loco psicópata enmascarado asesinaba a sangre fría a tres chicos y si no fuera porque grité, yo iba a ser su cuarta víctima.

-¿Quiso hacerte algo?

-Iba a eso pero no pudo – se cubrió el rostro con las manos y rompió en llanto sin importar que lo vieran así tan vulnerable. Zico le rodeó los hombros con un brazo y le dio unas palmaditas. En eso la puerta se abrió y vieron a entrar por ella a Jaehyo y Min Hyuk; éste primero se precipitó hacia la camilla.

-¡Kyung, dime que viste! – le ordenó con desesperación.

-Déjalo Jaehyo ¿Qué no ves que quedó traumatizado? No lo ataques con preguntas – dijo Zico algo molesto por la actitud insensible del muchacho.

-Lo siento pero es que necesito saber si vio quien era, si vio quien fue el maldito que dejó a Taeil en coma.

-No vi nada, llevaba una máscara o un intento de ella.

-Como sea – intervino Min Hyuk – Afuera hay policías que quieren hablar contigo para que des la declaración de lo que viste.

-No quiero – volvió a acostarse y se tapó con las sábanas. Enseguida se descubrió - ¿Por qué? ¿Por qué siempre yo tengo que presenciar estas cosas? Primero con lo de Kyu Yoon y ahora esto que fue mucho peor, fue...-el llanto no lo dejó terminar de hablar.

Zico propuso que se fueran para que Kyung pudiera descansar y pasar el trauma, aunque seguramente no sería fácil. También les dirían a los oficiales que era mejor a que esperaran hasta que el chico estuviese más tranquilo, aún era demasiado pronto.

-Zico – llamó Kyung al chico que ya estaba en el marco de la puerta para salir - ¿Puedes quedarte?

-¿Yo?

-No quiero estar solo, tengo miedo.

El alto se acercó a él y lo observó con una ceja alzada.

-¿Por qué me miras así?

-¿Por qué quieres que te acompañe? Además de porque tienes miedo ¿Por qué no se lo pides a otro?

-Somos amigos ¿No?