Sorpresa

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"Quizá tiene razón" pensaba mientras descansaba sola en la habitación, "quizá si estaba enojada y no tuvieron la culpa de nada" pensó tomando al fin una decisión.

Q: Rach –dijo llamando suavemente su atención- tenemos que hablar –dijo acercándose un poco más al sofá-

R: que quieres? –preguntó resentida-

Q: necesitamos hablar –dijo parándose detrás del sofá-

R: no hay nada de qué hablar –dijo acurrucándose más en el sofá-

Q: claro que hay de qué hablar –dijo suavizando su voz-

R: no, no lo hay

Q: vamos a la habitación –pidió-

R: no, este sofá es mi cama, me lo merezco, recuerdas? –dijo con un tono de voz que hizo dolor un poco el pecho de la rubia-

Q: claro que no, tu lugar es junto a mí –afirmó-

R: dormiré aquí, todo fue mi culpa, me lo merezco

Q: lo siento, actué mal –dijo sentándose en un pequeño espacio que quedaba en el sofá de la castaña-

R: no importa ya, fue mi culpa

Q: no fue mi culpa, quise desquitar con ustedes mi rabia –dijo asumiendo su culpa-

R: ya está

Q: lo siento, lo siento. Actúe muy inmadura

La noche trajo para la rubia y la castaña una charla sincera, que despejó dudas y reafirmó sus sentimientos.

S: buenos días María –dijo con una gran sonrisa-

N: Nicole, me llamo Nicole –dijo mientras mantenía su mirada fija en la pantalla del computador-

S: otra vez cambiaron de secretaria? –preguntó confundida-

N: así es –dijo asintiendo-

S: pues buena suerte –dijo perdiéndose en su oficina-

N: gracias –susurró-

La morena estaba muy nerviosa, sería un día muy importante.

S: hiciste lo que te pedí? –preguntó por el teléfono-

N: está todo listo –aseguró-

S: segura? –preguntó nuevamente-

N: si

S: a qué hora es la cita?

N: la espera a las 5 de la tarde

S: ok, ok, gracias –dijo cortando la comunicación-

La morena estaba más feliz que de costumbre, estaba a punto de tomar una gran decisión, de hecho ya lo había hecho pero ahora era el momento de decírselo a alguien más.

V: entonces ya está lista –dijo mientras se adelantaba a la morena-

S: muero por verla

V: tienes todo lo que pidió, es la ideal -aseguró-

S: se hicieron todas las adecuaciones? –preguntó mientras seguía al vendedor-

V: así es –dijo abriendo la cerradura- bienvenida a su nuevo hogar –dijo abriéndole el paso-

S: es hermosa –dijo mientras avanzaba llena de emoción por la casa-

V: tiene todo lo que pidió, se hizo todo lo que exigió, es ideal –decía el vendedor con una gran sonrisa al ver los ojos llenos de brillo de Santana-

S: está genial –dijo perdiéndose por el corredor-

V: los colores, las texturas, los espacios –enumeraba-

S: quiero ver lo más importante –dijo regresando hacia el vendedor-

V: ah sí, está por aquí –dijo guiando a la latina-

S: woooow –dijo soltando una gran bocanada de aire que denotaba asombro- es grandioso –dijo entrando en él y analizando cada pequeño detalle-

V: tiene todo

S: todo es grandioso –dijo mirando agradecida al vendedor-

V: entonces todo está a su gusto?

S: habla en serio, todo es genial, le va a encantar

V: cerramos el trato entonces?

S: obvio –dijo con una gran sonrisa-

La latina estaba más que feliz, estaba casi segura que la sorpresa haría inmensamente feliz a su amada rubia.

R: entonces es una fecha especial? –preguntó mientras observaba a la rubia nerviosa arreglarse en frente del espejo-

B: cada fecha es especial a su lado –dijo mirándose a su misma en el espejo con una gran sonrisa-

R: aahg, no seas cursi, hablo en serio –dijo quejándose-

B: no encuentro en si una fecha especial, simplemente estar juntas

R: Santana es una ridícula enamorada –dijo asqueada-

B: yo de ti no me quejaba –dijo picándola-

R: de seguro es algo normal pero como la tiene boba por ti entonces quiso tener un detalle especial

B: jamás me cansaré de eso –dijo mientas sonreía al recordar todos los momentos en que la latina de una u otra manera la había hecho sentir especial, única y amada-


Los años pasan, la gente cambiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora