Parte única.

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Harry era uno de los empresarios (hablando ilegalmente en el ámbito de la mafia) más importante de Europa. Descendiente del Kaiser (emperador) alemán, hijo del comendador más temido y heredero de la familia Styles. Pertenecientes a la mafia de las primeras generaciones, reyes del contrabando. Hacía 10 meses que Harry había heredado las riquezas y el poder que su padre había dejado en sus manos. Todo aquello por lo que Harry había sido especialmente educado. Desde 7 meses Harry ejercía como Kaiser, pero no dejaba de ser el niño mimado que todos conocían. Al quedarse sólo tras la pérdida de su padre, Harry no había cambiado en lo más mínimo, todo lo que quería lo obtenía y nadie se atrevía a negar o protestar por el temor que le tenían a aquellas orbes esmeralda opaca. Harry hacia unos pocos meses atrás estaba empeñado en ir a la ciudad natal de su padre, Múnich. Por lo cual su jet privado lo esperaba pronto para volar. El día 11 de Mayo de 2014, Harry viajó con un ejército de guardaespaldas digno del hijo de la Reina de Inglaterra. Pero el sólo era Harry Styles, actual Kaiser. Todos se preguntaban por qué Harry había estado tan interesado en ir a la ciudad natal de su padre, cuando nunca había movido ni un músculo, muchos dudaban de que él no conociera de donde era oriundo su padre. Pero nadie sabía que mientras Harry estaba preparándose para asumir el puesto del nuevo jefe, había descubierto los asesinos culpables de la muerte de su madre y hermana. Muchos creían que había decidido mostrarse ante los seguidores alemanes que su padre tenía, como el nuevo Kaiser de la Deutsche mafia

Al llegar por fin a Múnich luego de tres horas de vuelo. No eran muchas, pero para Harry eran tres preciadas horas que podía haber usado matando a los hijos de puta asesinos de su madre y hermana. Al llegar a Múnich se encontraría con Niall, socio y amigo que tenía en aquella ciudad y encargado de manejar los negocios en el lugar mencionado. A la noche habían quedado de salir a un club, porque al fin y al cabo, él era Harry Styles, además de Kaiser, era el Rey de las fiestas y no podía negarse a semejante invitación por parte de su amigo. Pero lo que Harry no sabía era que Niall tenía unos planes un poco inesperados. Primer dato que se le escapaba al chico Styles.

Estuvo todo el día en diferentes reuniones, con gente odiosa y lo único que le inspiraban era asco, pero negociosos eran negocios y ahora como Kaiser el no podría dejar que otros hicieran lo que solamente él podía. Eran poco más de las nueve y media de la noche cuando llegó a su casa en la nueva ciudad y Niall ya estaba listo, a veces dudaba de si alguna vez descansara. El rubio estaba con un entallado traje azul y perfectamente cuidado que hacía resaltar sus ojos de color cielo. Harry murmuró algo incomprensible mientras subía las escaleras como si su cuerpo estuviera muerto. Todas las reuniones que había tenido en el día y ninguna señal de las personas a las que había venido a buscar. Cuando salió de una ducha, la cual pareció un baño de cinco días, rebuscó en la poca ropa que había traído y vio que no tenía nada que ponerse. Pero no se había dado cuenta del traje que estaba sobre su cama, luego de varios minutos los cuales pasó muchas veces por su mente la idea de quedarse a dormir, vio la vestimenta que estaba sobre su cama. Una camisa negra con un saco y pantalones ajustados del mismo color esperaban cubrir su cuerpo, haciendo juego con unas botas de punta de cuero color marrón. Medio a regañadientes se vistió y seco su cabello dejándolo a la vez medio desordenado. Le encantaba llevar el pelo largo, lo revolvía un poco para acomodarlo -más bien, desacomodarlo- y ya obtenía el look que quería.

Cuando bajó las escaleras vio a un Niall impaciente. O el chico estaba sin salir hacía años, o tenía algo lo cual le escondía a Harry. Y todos sabían que era la segunda opción. El rubio había estado manteniendo una especie de relación con el Barma de Macy's, el club de stripperes más importante de toda Múnich. La única diferencia que se presentaba ante los ojos de Harry era que esté, era un club exclusivo para gays, información que había sido omitida para el Kaiser. Luego de más o menos media hora, llegar al lugar que tanto ansiaba ver. Todos habían dicho que era un muy buen club, pero le parecía extraño el hecho de que al llegar, no había visto ninguna chica en la entrada o alrededores. Y ahí el chico capto todo. El club era gay y nadie le había avisado. Cuando se planteo decirle algo a Niall, se encontraba en una banca de la barra y ni señales del rubio tenía. Un chico se acercó, al parecer se llamaba Liam y era el dueño de aquel lugar. Su voz era un poco más aguda y Harry se debatía si en verdad era así o el chico la estaba cambiando. Pero dejó de prestarle atención cuando le dijo que su mejor stripper lo estaba esperando en la mejor habitación de todo el establecimiento. Por su mente se paso agradecer la invitación y negarse, ya que él no había pedido ningún chico, ninguna habitación, él ni siquiera era gay o bisexual. Al menos eso creía.

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⏰ Última actualización: Nov 04, 2015 ⏰

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