me desperte como de costumbre, noté que la noche anterior habia llovido, pense "¿habra llovido fuerte, o solo fue una llovisna?", no le preste mucho cuidado a esa pregunta y me levante con mi usual pereza, me bañe, me vesti y baje a desayunar, como iba un poco tarde desayune lo primero que encontre, fui a mi escuela y derrepente la tormenta cae sobre mi pienso "soy la persona mas de malas del mundo... oo...¿tal vez sea cosa del destino?"corro para llegar a mi transporte, pero el maldito que conducia su carro me empapó de la cabeza a los pies, pobre desgraciado, no sbae que ahora le estoy maldiciendo su tumba, pero en fin monto en mi transporte y me sacudo el pelo para tratar de que no me quede tan mojado, pero al notarlo habia mojado a un señor elegante, a una anciana y a un muchacho (vale la pena aclararlo era guapo), pido disculpas obvio poniendome colorada, y para que no lo noten volteo para el otro lado y pienso "mierda, ¿por qué a mi?", rezo para que llegue rapido, pero de repente escucho que el muchacho me dice-tranquila, te entiendo llueve mucho- y se baja en la siguiente estación. No lo puedo creer, al menos algo bueno salio de este día, pero en fin, lo unico que me preocupa es llegar a la escuela lo mas presentable que pueda, seca. Al llegar noto que no hay puestos, me toca buscar en los salones a alguien que le sobre un puesto, ¡BINGO! en un salon de al lado le sobra un puesto, pero es el mas feo de todos: rayado, chueco y con una pata a punto de caerse, lo llevo al salon y al colocar mis libros sobre el, se desploman, caen por todo el piso, lo unico que oigo son las risas de mis compañeros, tragame tierra, intento acomodarlos lo mas rapido posible, pero no puedo, de repente la unica persona que se digna a ayudarme es una compañera a la que me gusta llamar "geek" porque lo es, -gracias- es lo unico que le digo, me muestra su sonrisa y se sienta en su puesto. Pasa el día lo mas lento que puede y lo unico que me distrae de mi anormal día es el libro que estoy leyendo: "las chicas de alambre", nadie sabe quien lo escribio, o lo mas importante, que exista, pero eso es lo bueno porque algo he aprendido: si se presta un libro, este va perdiendo su dignidad, su significado original, lo leo, pero cuando ya casi lo acabo me doy cuenta de que se termino mi jornada, empaco todo lo que habia en mi inmundo puesto y me largo, monto en mi transporte de vuelta a casa claro sin olvidarme del muchacho, me bajo y llego a casa, me quito mi uniforme y me doy cuenta que tenia manchas de barro por todo lado, mi vida apesta, me toco lavarlo y plancharlo para que mi mama no se diera cuenta, cuando precisamente lo colgue en la cuerda, mi mama entra en la puerta con su saludo- ya llegue, traje la comida- eso es signo de que vaya directo a saludarla y despues derechoa la mesa, comimos pero sin que faltara la usual pregunta que todo padre o madre le hace a sus hijos -¿y como te fue hoy?- y tambien esta-¿que hiciste?- a ambas todos contestamos -bien, nada- y despues silencio, mama se levanta de la mesa y lava la loza, yo por otra parte, absorta en mi libro. Cuando lo logro acabar, me doy cuenta de que tengo que dormir, me pongo mi pijama y me acuesto, pero antes de que pudiera quedarme dormidamiro la ventana y veo que caen gotas y digo -si va a llover, por favor no me des la misma rutina, no me des la misma empapada, el mismo acto vergonzoso del muchacho y de la silla....pero solo quiero una cosa, que me des el mismo gusto que tuve con mi libro, porque fue lo unico que me logro sacar de mi rutina y llevarme a una historia diferente e interesante mas que la mia-.
Si lees esto, no te desepciones con mi historia, es algo que pasa, a mi me paso no quise aburrir a nadie, solo exprese lo que en realidad es un dia en mi vida, si te gusto hasmelo saber, y si no, pues prefiero que no me digas nada