Una historia sin puto sentido.

La línea entre la vida y la muerte.

Hace mucho tiempo un niño cuyo nombre no será mencionado quiso ir a comer pollo a un lugar muy famoso "Pollos Ass" porque a los chicas de verdad les gusta el pollo frito.
Y de pronto una patata salvaje cayó por unas escaleras con gradas y una baranda de pasta Roma. La patata exclamó -¡CARACOLES! Mientras caía al vacío. El niño asustado de tal acontecimiento grito a tal punto de salir mariposas de su boca que se convirtieron en pegasos morados que volaron y volaron en aquella noche oscura de invierno.
Siguiendo con la historia de la patata, al llegar al suelo dijo con una voz aguda -Tu, niño, el cual no se ha mencionado el nombre... Coma Coma pastas Roma y ese fue su último suspiro. La pata explotó en mil pedazos quedando papas fritas regadas por el suelo, de pronto apareció una poderosa hormiga homosexual que exclamó -¡RECORCHOLIS! Pero que perturbador7. El niño cuyo nombre no es mencionado llamó a una ambulancia para tratar de salvar a la patata o lo que quedaba de ella *se escuchan perturbadoras voces* -Sangre, dolor, sufrimiento, agonía...
El niño decidió comerse las patatas fritas e irse en la ambulancia.
Al llegar a su casa su perro rojo que se encontraba cagando fue aplastado por un avión que volaba muy cerca de su casa. El avión explotó en arco iris y helados el niño gritó -¡RAYOS Y CENTELLAS! Al decir esto PeppaPig apareció y se convirtió en bacón que todos comieron y fueron felices. Fin (excepto la pata que fue devorada)