Ella sabe a café,
el café de las mañanas cuando te levantas,
despistado,
deshaciendo las telarañas de los sueños.
Es el café amargo que te despierta,
y se acomoda en tu barriga,
cálido,
agradable,
nostálgico,
amante.
Y es que eres como el café,
en todos los sentidos,
amargo,
dulce...
me desvelas por la noche,
y me proteges de la soledad
tu pelo negro,
como el café,
tus ojos negros,
como el café,
tu dulce sabor amargo,
como el café.
Deshaciendo las telarañas de sueños del ayer,
sueños rotos.
Sueños con café.
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Nos volveremos a ver. { II }
PoesieSegundo poemario. "Pretendo describirte en un papel y no consigo nada, sólo palabras inconclusas, Una nada que rellena de tinta se convierte en todo" La poesía me da vida y me la quita de la misma manera, Me gusta escribirla sin planificarla. Sana y...