Veamos que tenemos aqui

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Había mucho ruido en el pasillo del edificio.

-¿Qué demonios es eso?- exclamó Bea enojada.
-A lo mejor alguien se está mudando- supuso Riley.
-Espero que sean chicos lindos- dijo Sabrina emocionada.
-Claro...- añadió Bea rodando los ojos.
-Por cierto ¿ya está la comida, Bea?- se quejó Riley- muero de hambre.
-¿Quieres el espagueti al dente?- preguntó Bea desde la espaciosa cocina del departamento.
-Uuuh... eso suena a lo que diría un lindo francés- canturreó Riley- eso es un sí definitivo.
-Entonces está en unos segundos.

Bea sirvió un plato de espagueti y le puso salsa de tomate encima. La chica se sentó en la pequeña mesa de la cocina con un mantel blanco, flores en el centro y cuatro sillas cada una de un diferente color pastel.

-¡Hey! Bea, no me pusiste espagueti a mí- se quejó Sabrina.
-La nuestra no la voy a hacer al dente- le explicó la chica regresando la olla al fuego.

Riley enrollo un poco de pasta en su tenedor y lo metió en su boca.

Del otro lado del pasillo...

Tres chicos metían cajas al apartamento número treinta y seis. Un azabache, un castaño y un rubio. Subían y bajaban del elevador, ejercitándose un poco.

-hey chicos, creo que hay una pelea de chicas al otro lado del pasillo- silbó el de cabello azabache.
-¡Yo quiero escuchar!- exclamaron el rubio y el castaño.

Los chicos pegaron su oído a la puerta del departamento de en frente.

-¡Pero si esta cruda!- exclamó una chica del otro lado de la puerta.
-¡era al dente, inculta!- exclamó otra.
-¡Sabrina! Ayúdame- se quejó la primera voz.
-¡Riley, cállate!- ordenó la segunda voz.
-¡El que tú seas la que tiene más zapatos no significa que puedas mandarnos!- se quejó la primera chica.

Los chicos estaban tan pendientes en imaginar cómo serían las chicas, lo cual no sería agradable de ver, que no se dieron cuenta de que los pasos detrás de la puerta se escuchaban cada vez más cerca, hasta que esta se abrió.

Los tres chicos cayeron a los pies de Bea quien los miraba con una mezcla de curiosidad y de diversión.

-Veamos que tenemos aquí- dijo Bea sonriendo mirándolos con superioridad.

Los tres chicos se pararon lo más rápido que pudieron, para encontrarse a un cabello pelirrojo y unos brillantes ojos verdes. Bea tenía una radiante sonrisa divertida en sus labios pero en cuanto sus ojos se encontraron con unos azules pertenecientes a ese encantador chico divertido su sonrisa desapareció.

-No me digas ¿Isaac?- preguntó Bea sorprendida.
-¿Bea? ¿Bea James?- inquirió Isaac más sorprendido que la pelirroja- ¿La chica nerd de lentes grandes, camisas y faldas escolares? O y ¿Cómo olvidarlo? Tus dos coletas.
-bueno nerd de la computación, tú no te quedabas atrás.
-Oh, seguro- dijo Isaac con sarcasmo- veo que te transformaste en un la mariposa.
-Si esperas un cumplido, quedaras decepcionado, porque...- dijo Bea mirándolo de arriba a abajo- Tú sigues igual.
-¿Alguien puede explicarnos que está sucediendo?- pidió el castaño.
-Oh, claro- recordó Isaac- Él es Nathan- presentó señalando al castaño- y Fred, ella es Bea.

Los chicos evaluaron a Bea de arriba abajo claramente deleitados.

-¿Bea?- preguntó Sabrina desde la cocina- ¿Quiénes son?

Las cabezas de dos chicas, una rubia y la otra castaña se asomaron por la puerta de la cocina.

-¿invitaste a chicos y no nos avisaste?- preguntó Riley, la castaña, alisando su falda.
-Si son igual que su líder, Isaac, no valen la pena- le advirtió Bea mirando a sus amigas.
-¿Y al menos nos los vas a presentar?- preguntó Sabrina saliendo de la cocina, sonriéndole a los chicos.
-Como quieran, Nathan, Fred e Isaac- presentó la pelirroja señalándolos respectivamente.
-Y para que conste aquí no hay ningún líder- añadió Fred- pero si lo hubiera seria yo.
-Lo que digas- le dijo Bea arrugando la nariz- conozco a Isaac, él siempre va a ser el líder de la pandilla.
-¿De dónde se conocen?- preguntó Nathan.
-La secundaria- explicó Isaac.
-Espera, espera, ¿ella es Bea James tu súper enemiga de todos los tiempos?- casi gritó Fred sin poder creerlo.
-Oh, esto es incómodo porque a las chicas nunca les hable de ti- explicó la pelirroja mordiendo la punta de su pulgar- pero me alegra de que sea la villana y no la damisela en apuros.
-Pero lo fuiste.
-¿y tú no?- Bea ladeó la cabeza con inocencia.
-Menos veces que tú, claro está- sonrió orgulloso Isaac.
-Pero eres un hombre, Isaac- le recordó Bea borrándole la sonrisa- no se supone que seas la damisela en apuros.
-Y si lo fuiste no se presume- añadió Sabrina encogiéndose de hombros.
-Lamento interrumpir su linda charla- dijo Riley-pero ¿Qué hacen aquí?
-Nos mudamos enfrente- explicó Nathan sonriéndole a Riley quien le hizo una mueca -Linda- silbó el en un susurro.
-¿Qué?- inquirió Riley mirando a Nathan con insuficiencia.
-Digo que eres linda.

Las mejillas de Riley se coloraron a más no poder pero mantuvo una expresión seria, lo que hizo que Nathan sonriera.

Vaya ojos verdes, pensó Riley al ver bien a Nathan.

-Bueno, bueno- interrumpió Bea- ya se van ¿no? un placer nuevos vecinos.

La pelirroja les iba a cerrar la puerta pero Isaac la detuvo.

-aun no nos vamos, queremos saber ¿de que discutían?- inquirió el chico.
-Espagueti crudo- respondió Riley al instante.
-Al dente- defendió Bea.
-Que por cierto se quema- añadió Sabrina.
-¡Santa vaca inflada!- exclamaron Riley y Bea al mismo tiempo.

Las chicas corrieron a la cocina dejando sola a Sabrina con tres chicos.

-Fred ¿verdad?- preguntó Sabrina al rubio.
-el único e inigualable- respondió el sonriendo e inflando el pecho.
-Suponiendo que eres el líder- le dijo Sabrina- saca a tus monos de aquí.
-Ya oyeron muchachos- exclamó Fred al estilo militar- esa chica me cae bien- susurro.

Los chicos se fueron a su apartamento dejando a las chicas solas.

-¿era tu amigo en la escuela?- preguntó Riley.
-¿Isaac? No, para nada,- dijo Bea arrugando la nariz- nunca.
-¿ambos eran nerds?- preguntó la castaña sonriendo y Bea asintió de mala gana- no es feo así que podrían haber sido la pareja más linda del planeta tierra.
-Es que deberías haberlo visto en la secundaria ¡lleno de granos!- exclamó la pelirroja riendo- era espantoso.
-Tienes que enseñarnos fotos.
-¡Su foto del anuario es más que horrible!

Las chicas estallaron de risa. Después de que Bea y Sabrina terminaran de comer la pelirroja busco su anuario de secundaria, estaba en el librero y había acumulado un poco de polvo. Isaac era todo un nerd, lentes de marco grueso, camisas abotonadas hasta el último botón, tirantes y pantalones color arena, por no hablar de su cabello totalmente engominado o de su cara, llena de acné.

Mientras las chicas se reían del Isaac de secundaria los chicos arreglaban su apartamento o eso intentaban.

Colocaron una mesa de hierro negro en la cocina y dos de las camas, unos momentos después se sentaron, exhaustos.

-Así que esa es la chica de tus pesadillas ¿he?- preguntó Nathan para romper el hielo.
-si, esa misma- confirmó Isaac.
-Creí que sería una chica súper alta, de mirada fría y calculadora- confesó Fred.
-En cambio ella es ternura y glamour- añadió Nathan fingiendo echar su cabello sobre su hombro.

Isaac solo rodó los ojos.

Si la conocieran bien, pensó.



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⏰ Última actualización: Nov 13, 2015 ⏰

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Los Chicos de Enfrente 2.0Donde viven las historias. Descúbrelo ahora