- 323, 324, 325... Aquí! Supuestamente aquí es. - Mis pasos se detuvieron a mitad la calle, en frente de mi se encontraba una casa que se podría decir que era de los años 50's, y que muy fácilmente se encontraba de pie.
Analice con la mirada aquella casa, me pregunte si realmente la dirección que me habían dado estaba bien.
*Calle Lincon #325*
Con el ceño fruncido subí los escalones que me separaban de la entrada, un pórtico de madera astillada y una puerta blanca roída y con manchas amarillentas me recibieron.
Intenté tocar el timbré, y por supuesto, no funcionaba; di tres toques... Dos toques... 5 toques... Después 1 y nadie me abrió.
Apoye la palma de la mano en la puerta y negué con la cabeza, di media vuelta y di un brincó, un par de grandes ojos azules me observaban desde un escalón.
- ¿Quién eres? - una voz ronca, que relataba una larga vida de fumador, me preguntó, el señor paso de largo hacia la puerta y con un manojo de llaves igual de viejos que la casa abrió la puerta, que para colmo rechino en bienvenida.
- Soy un amigo de Trenton, señor - Murmuré mientras el me hacia una seña desde la puerta para que pasara.
- Ahhhh, el buen Trenton, sus amigos, son mis amigos ¿Para qué soy bueno muchacho?, ¿Para qué te mando Trenon? - El señor se sentó en un sillón indicándome que me sentara en una silla frente a él, sacó una cajetilla de cigarrillos y me ofreció uno, lo tome al igual que el y dimos una calada, con los movimientos a sincronización cómo si lo hubiéramos ensayado por años.
- Dijo que sería bueno escuchandome señor, que a el lo ayudó mucho - Dije antes de dar una segunda calada.
El miró, una sonrisa de dientes amarillentos apareció y dijo...
- Uhmmm el buen Trenton, siempre queriendo ayudar a la gente... -
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SMILER CRAZY
Mystery / ThrillerEl era solitario, frío y una inadaptado social. No le importaba lo que la gente opinará acerca de sus ideas. Pedía ayuda a gritos, pero nadie se dignaba a ayudarlo. Sus malas amistades lo hacen conocer a Oliver, un viejo que esta dispuesto a escucha...