Narra Satine.
Cuando me levanto le veo dormido y le miro de reojo mientras duerme y sonrío involuntariamente. Le toco el pelo y poco a poco abre los ojos y aparto la mano rápido.
-¿Qué haces? - pregunta aclarándose la voz.
-Pues nada, que voy a hacer
Se vuelve a arropar hasta la cabeza y meto la mano bajo las sábanas busco su suave pelo, noto su respiración en mi tripa y me empieza a besar, encuentro el pelo con los dedos y le tiro fuerte y me voy rápido a la cocina para que no me coja,cuando llega a la cocina me consigue arrinconar en una esquina.
-¿Qué has hecho? - sonríe y me levanta un poco la camiseta
-Tirarte del pelo y ahora fuera- pongo mis manos en su pecho e intento apartarlo.
Comienza a mirarme a los ojos y a pegarse a mí, y finalmente acaba consiguiendo que mis ojos verdes se encuentren con los suyos, acerca los labios a los míos. Me besa tiernamente pero no paro de pensar en que no llamé a mi madre.
-Christian por favor, para.
-Venga, no pasa nada - dice con un hilillo de voz
-Fuera de mi casa
-¿Por qué?- pregunta separándose
-Porque lo digo yo
Se separa y abre la nevera
-No me voy a ir hasta no desayunar
-Eres un puto gorrón de mierda, coge tus putos pantalones y vete - elevo el tono de voz y pongo los brazos en jarra.
Me mira y cierra la nevera de golpe y sin decir nada se va a la habitación, no me siento culpable, me daría de guantazos por haber hecho lo que hice anoche, no me tengo que sentir culpable por nada lo hice porque quería y es un gilipollas que va a pasar de mi, se lo merece.
