Parte única

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*Se puede decir que este one shot es una continuación, o más bien esta ligado al one shot "Lindo Acosador"*

Era un chico solitario, de esos que prefieren el silencio y la paz. Su estatura poco común para su edad, su sonrisa un tanto apabullante, sus ojos expresivos y sus extrañas orejas grandes, no eran la combinación ideal para nadie.

El primer día de instituto le trajo cosas maravillosas, incluida por supuesto una mirada color miel que le fascinó.

Chanyeol quedó encantado con ese par de ojos inquietos y sonrientes. Desde el primer instante se enamoró de la línea negra que enmarcaba esos ojos ámbar.

Su apellido era Byun, no sabía nada más de él, y eso lo sabía porque lo había escuchado de los labios de un profesor.

Pasó días, semanas enteras admirando a ese chico de tez pulcra que lo tenía fascinado. No sabía cómo acercarse sin que el otro pensara que era un acosador o algo peor.

Un mes y medio fue suficiente para que Park Chanyeol se diera cuenta que estaba perdidamente enamorado de Byun.

Byun Baekhyun, el hijo de un reconocido abogado. El presidente del club de poesía, uno de los mejores estudiantes.

Dos meses más pasaron y Byun ni siquiera sabía que Chanyeol existía, mientras que el alto sabía todo sobre el pequeño hombrecito.

-Es que no puedo... -Se decía Chanyeol en la soledad de su habitación -No puedo decirle a nadie.

Pasaba sus días pensando en el chico de ojos miel, y sus noches las pasaba en vela buscando la manera de enamorarlo.

No había encontrado esa forma.

Cuando el cuarto mes de amor llegó, Chanyeol habló por primera vez con su niño de ojos delineados. Sólo fue un simple "lo siento mucho" ya que habían chocado en el pasillo, pero eso fue suficiente para que el corazón de Chan se hinchara de alegría.

Necesitaba hacer algo, ya no podía estar en aquella situación, ya no quería solo ver ese cuerpo pequeño pasar delante de sus narices. Park necesitaba darle un abrazo, necesitaba sostenerlo de esa cintura marcada que tenía y darle un beso que los dejara a ambos sin respiración.

Sí, él lo deseaba con cada partícula de su cuerpo. Deseaba ser la razón de esa sonrisa tan linda, quería ser su todo.

-Yoo-Yoora... -Susurró el alto como si no quisiera llamar a su hermana mayor -puedo... pedirte un favor.

-Claro Yeol ¿Qué Ocurre? -Cuestionó la mayor extrañada, era la primera vez que su hermanito le pedía ayuda.

-Estoy enamorado y no sé que hacer...

Ya lo había dicho, no podía retractarse, lo único que le quedaba era escuchar las carcajadas por parte de su hermana y los arrumacos que le daría su madre. Sí, sólo tenía que aguantar eso. Porque estaba seguro de que su hermana le contaría a su madre apenas saliera de la habitación.

Fueron dos horas las que Chayeol se mantuvo conversando con su hermana mayor. Dos horas en las que le preguntó todo lo que pudo a Yoora y dos horas en las que le contó de quién y por qué estaba enamorado.

Club de Poesía {BaekYeol}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora