13 años atrás...
Estaba jugando con mi mascota, es un hermoso perrito Pug, lo llame Jev, no se porque. Un día vi el nombre y me enamoré del perro y él, lo se muy lindo.
- Luna, tenemos nuevos vecinos, ven. - me dice mi madre mientras camina hacía la entrada de la casa de junto. - Creo que hay un pequeño, así tal vez jueguen juntos.
- Pero ya tengo a Emma, ella es mi amiga y nos divertimos mucho. - -hago pucheros y en eso se abre la puerta, dejando ver a un niño más grande que yo.
- Hola, ¿en que puedo ayudarles? - nos dice muy formal y arrugo la nariz. Se ve muy pijo y no me agrada.
- Hola, cielo. Somo vuestros vecinos, ¿estarán tus padres? - pregunta mi madre con su voz más tierna y amable. Tal vez le suavice el gesto.
- Eina, tu madre esta como loca buscándote. - llega una señor mayor, ve a mi madre y nos mira. - Oh, lo siento. Buen día, soy John Collins, padre de Eina. - le tiende su mano a mi madre y nos deja pasar.
Yo camino junto al niño mientras mi madre saluda a una señora, tiene los ojos miel como Eina, solo que los suyos demuestran amor, cariño, sentimientos. Veo como saluda a mi madre y de nuevo habla con esa voz de madre normal.
- Luna, cariño, ven a presentarte con el señor y la señora Collins. - camino un poco insegura hasta mi madre y me escondo detrás de su pierna.
- Ven, cielo, no mordemos. - dice el padre del niño y me acerco con una sonrisa tímida.
- Hola, soy Luna Vennet. Encantada de conoceros. - les extiendo mi manita y mi mejor sonrisa, el padre me da su mano.
- Yo soy John, el padre de Eina. - me dice y me giro a ver al chico, parece un poco... mmm, no se, tiene algo raro.
- Y yo soy Astrid, madre de ese pequeño gruñón de atrás. - me rió un poco y escucho un bufido de Eina, parece inofensivo. - Deberían salir a jugar, vi que tenias un hermoso perrito. Anda, Eina, juega con Luna, es un amor de niña.
- Gracias, señora Collins. - le digo antes de girarme y seguir a Eina hacia la salida. - Entonces, tu eres Eina, ¿cierto? - silencio, silencio, silencio...
- Si. - a, claro, mucha información. - ¿Por qué Luna? - me pregunta cuando ya nos sentamos en el césped y mi amado Jev se sienta en mis piernas a que lo acaricie.
- No lo se, mi madre dice que es por mis ojos, mi padre también tiene una teoría rara, él dice que es por la noche en que nací y así sucesivamente, otros dicen que para que llame la atención, pero a mi siempre me a gustado ser discreta... - le respondo mirando a Jev, alzo la vista y me topo con sus ojos, hermosos.
- Oh... - hasta ahí termino toda conversación, mi madre salio y me fui a mi hogar.
Por la noche mi padre nos preparó la cena y me quede dormida escuchando a mi madre hablar con él, no se que rayos decían. Como a la media noche un trueno realmente fuerte me despertó, asustada corrí a la ventana.
Caía una tormenta, realmente fuerte, seguí observando la tormenta hasta que vi a Eina parado en su ventana, lo observe un rato más hasta que nuestros ojos chocaron y mi estomago tuvo una fiesta, me regalo una sonrisa de lado y desapareció un segundo.
Al poco rato llego con una libreta y un plumón, veo que escribe algo muy rápido y después veo la letra: "¿Miedo a las tormentas?" Veo que dice y me rió un poco. Niego con la cabeza y sonrió a modo de respuesta.
Me la pase hablando con él casi toda la noche, hasta muy entrada la noche me recosté en mi sofá y no supe cuando me quede dormida, solo recuerdo ver su sonrisa y un guiño por su parte, solo eso. Solo sentí como mi madre me llevaba en brazos a la cama, volví a dormirme.
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Actualidad... ;3
- Luna, vamos despierta, hoy es tu cumpleaños. - escucho como dice mi loca amiga Emma, es cierto, hoy es mi cumpleaños número 18, el tan esperado día.
- Ya voy, ya voy. Diablos, ni en mi cumpleaños me dejas dormir más tiempo. - le digo mientras me siento en la cama, veo a mi alrededor y solo estamos ella y yo. - ¿Han llamado del hospital? - le pregunto y ella niega. - Otro día más sin ella...
Me levanto y corro a darme una ducha, hago mis necesidades y lavo mis dientes, termino en unos 25 min. y salgo junto a mi amiga que ahora tiene un rico desayuno y un regalo, junto a mi bello perrito. Les sonrió a ambos y camino a mi armario.
- Dime que te pondrás un bonito conjunto de ropa, por favor. Ray debe verte hermosa. - me dice mi amiga y yo hago un intento de sonrisa, si solo supiera que Ray y yo ya no somos esa pareja feliz de segundo año.
- Claro, me pondré un vestido, así tal vez Eina me regale aunque sea una mirada... -le digo con una sonrisa triste, aun recuerdo los buenos tiempos junto a ese lindo chico. ¿Por que me tuve que enamorar de él?
- Vamos, Luna, las clases casi terminan, solo hoy y después la fiesta. - me dice con una enorme sonrisa, se la devuelvo.
- Aún faltan como 5 meses para terminar la escuela, lo sabes, ¿no? - le digo, pues es un poco temprano para salir, aún lo que se viene es una par de semanas libres de descanso. Hace un puchero y sale para terminar de arreglarse.
Tomo unas bragas azules y su sujetador igual, un jeans negro, una polera azul oscuro y mis Vans negras; me acerco al espejo y seco mi cabello, lo ato en una coleta alta y mi flequillo cae cerca de mis ojos, me pongo mascara de pestañas y brillo de labios.
Salgo de mi habitación y veo a mi amiga junto a su gato, salimos del departamento con nuestras mochilas y unas chaquetas por si algún cambio de clima se presenta, salimos del apartamento en busca del auto de mi madre.
Es un bonito BMW negro, lo se es mucho, pero mi madre tenía muchos ahorros y yo también, al igual que una empresa de la familia, mi madre tenía sus secretos, nunca quiso dejarme con mi padre, por eso quede a cargo de la familia de Emma hasta hoy, mi cumpleaños número 18.
Vamos en el auto directo a la escuela, vemos a todos afuera como si estuvieran felices de estas pequeñas vacaciones, estacionamos cerca de la entrada y bajamos, entramos juntas entre una charla amena, seguimos así hasta que diviso a Ray.
- Hola, hermosa. Feliz cumpleaños. - me dice antes de darme un beso y tomarme de la cintura, no lleva de nuevo a la salida. - Quiero darte tu regalo, vamos al auto.
Vamos a su auto y me sube al asiento de atrás, me extraño un poco pero decido dejarlo pasar, se sube conmigo y comienza a besarme, le sigo todos los besos hasta que estoy recostada en el asiento, mete sus manos debajo de mi blusa y lo separo.
- No, aun no estoy lista. - le digo con los ojos un poco bajos. Veo como su cuerpo se tensa, creo que esta un poco molesto. - Ray, no es que...
- Cállate y sal del puto auto. - me dice muy molesto, no quiero que me vuelva a pegar así que salgo del auto con mucha velocidad, veo a Eina a lo lejos y este me mira y después de gira.
Eso me duele más que lo que hizo el idiota de Ray. Decido entrar a mis clases, todo el día pasa normal, Calculo. Historia. Almuerzo. Biología. Deportes. Salida. Aburrido
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Todo de mi...
Teen FictionFiesta, Alcohol y Sexo. Mala idea... ¿Que pasa cuando conoces la verdadera personalidad de quien creías conocer? Descubre la historia de Luna y Emma... Siguenos...