Contesta. Namjin

Confianza.

- ¿Qué pasa?

El chico rubio dio un saltito y con los ojos abiertos se dio vuelta, mirando al causante de su susto. Había acabado con la paz con la que miraba por la ventana del departamento.

- ¡Eh! Me has asustado - le reprocho el líder de uno de los grupos más populares del k-pop en el mundo.

- Lo siento -murmuro con una sonrisa el castaño.

Al momento de disculparse sus manos delgadas se elevaron y se colocaron en la parte posterior del cuello del rapero, su parte preferida.
El chico reconocido como "el guapo" del grupo se sentía feliz y con suma confianza al estar con su compañía. Solo con él puede relajarse, y el hecho que ambos estén viviendo el climax de sus carreras ayudaba. Además de estar ambos en la misma posición frente a la vida. ¿Cómo? Estaban alineados en la parte defensiva del grupo eran como la gran barrera de su grupo llamado BTS, ellos iban a defender a sus compañeros como si eso dependiera su vida porque era una promesa en que solo ellos dos estaban presentes.

- ¿Los demás? - pregunto el rapero preocupado.

- En sus habitaciones - contesto una voz dulce que cada vez se acercaba más a la cara del otro, mientras unos ojos de color cafés lo miraban fijamente.

"Ah" modulo el rapero con su boca abierta y sus cejas alzadas.
A estas alturas ya está acostumbrado a estas demostraciones de afecto del chico alto. Mientras más días pasan, más cariñoso se pone y eso no era algo que Namjoon le molestaba. ¡Para nada! Adora ver al chico más guapo mirándolo con intensidad o toqueteándolo apenas se presenta la oportunidad.

- ¿No quedaste satisfecho anoche? -pregunto con su voz ronca sobre los labios del cantante.

El cantante se sonrojo. Paso de ser un Jin atrevido a uno totalmente tímido.

Siempre es débil ante esa voz ronca, que a veces pareciera que en vez de hablarle en coreano hablaba en inglés. Algo tiene esa entonación y su forma de modular que hacían perder la cabeza al pobre vocalista.

- E-estoy bien -tartamudeo tímido.

Namjoon soltó una risa bastante masculina y sus hoyuelos aparecieron en sus mejillas, logrando hipnotizar al mayor.

Perdido en sus pensamientos el hipnotizado no lograba entender a las personas que dicen que el rapero no es atractivo. ¡Vamos! Su seriedad, su sonrisa, su risa grave y hasta cuando estaba deprimido luce hermoso. Su piel de un color perfecto, su pelo que con cualquier estilo luce bien y sus ojos rasgados... ¡qué perfección!

Por otro lado al menor le divierte verlo con esos ojos de admiración fijos en su rostro. Conocía lo mucho que él lo amaba y lo fácil que era este en perderse mirando al otro, es por eso que lo evadía cuando una cámara estaba encima de ellos. No, no era fácil.

No pudo evitar tentarse a probar otra vez esos gruesos y suaves labios. Junto sus labios con los del mayor y de inmediato ambos reaccionaron al tocar la piel del otro, logrando que el beso perdurara en segundos que se volvieron minutos. Los labios de ambos chicos se mueven suavemente con una perfecta sincronización. Incontadas veces ha besado esos labios y nunca se ha aburrido, siempre hay algo nuevo en los labios de Jin. ¿Sería por las distintas comidas que come durante el día?

Siempre estos dos hombres tienen una temperatura distinta: Namjoon siempre sentía los labios de su amante tibios y en ocasiones hasta calientes, por otra parte Jin sentía los labios fríos del otro. ¿Extraño? Bueno, son el ying y el yang. Nada de qué preocuparse.

Las manos del menor se colocaron en la espalda baja del mayor. Acariciándolo de arriba a abajo mientras sus bocas cada vez se abrían más, llegando a formar un beso profundo en el que ambas lenguas se tocaban suavemente.