Ahí esta ella sentada en la cafetería como de costumbre, en un mesa para dos como si fuera esparar a alguien pero no solo esta sentado leyendo ese libro una y otra vez.
Todas las tardes a las 6:00 pm en punto entra por esa pequeña puerta, pidiendo un café de vainilla. Yo solo la observo y me enamoró de cada movimiento que hace...