Era lunes por la mañana mi mamá me tocaba la puerta, me decía medio enojada que me levantara porque se me haría tarde para él primer día de clases, abrí mis ojos y me levante un poco cansado, renegando porque no quería ir a clases. Al salir de la casa no dije nada me sentía muy nervioso para hablar no dije ni una sola palabra en todo el camino, al llegar a la escuela salí del auto y camine lentamente hacía la puerta un poco asustado y nervioso, antes de entrar le grité con orgullo a mi mamá despidiéndome de ella.
Después de un tiempo para ser exactos cerca de las vacaciones de navidad me di cuenta de algo, algo que negaba desde ya mucho tiempo esa cosa era la atracción hacia alguien esa persona en peculiar que me llamo la atención, esa persona que me sacaba sonrisas en mis días más grises. A esa persona la conocí hace ya mucho tiempo atrás me acuerdo cuando entre clases envés de ponerle atención al maestro nos pasamos notas preguntándonos cosas como si me aburría la clase, si tenía sueño, o simplemente para decir un Hola... un simple juego de niños. Pero al pasar los meses ese simple juego de niños se convirtió en algo más empecé a sentir mucha confianza hacía esa persona, tal era la confianza que no le temía decir lo que pasaba mis traumas, mis errores, mi vida... al fin de un tiempo empecé a sentir algo por ella y desde ese día cada vez que la miraba sonreía, quería estar con ella. Al principio me lo negué pensaba que como ella era tan hermosa no podría estar junto a alguien como yo, nada atlético, no muy inteligente y con una vida que estaba echa un desastre... pero fue en el convivio de navidad cuando me di cuenta que ya no aguantaba más ya no podía seguir ocultando lo que sentía me levanté de donde estaba sentado y decidido fui a buscarla al estar unos cuantos pasos me detuve, no pude decirle, envés de eso me senté al lado de ella y platicamos por un largo tiempo. Al terminar el convivio todos se fueron me despedí de ella y le desee una muy feliz navidad...
Al volver a mi casa sentí una gran desesperación, estaba enojado con migo mismo, no podía creer que no le hubiera dicho me sentía como un cobarde, un poco hombre... siempre pensé que no era tan difícil, me burlaba de las personas que no se atrevían a decir lo que ellos sienten hacia otras personas y mírenme estoy en esa misma situación. Las vacaciones se hicieron eternas esperaba con ansias el regreso a clases y así podría volver a ver a esa bella chica de la cual me había enamorado.
El regreso a clases fue muy placentero para mí ya que volvería a ver a la chica que me traía como loco. Paso un tiempo después del regreso a clases hasta que un día de febrero me decidí lo volvería a intentar, espere hasta la salida y le dije lo que por tanto tiempo había guardado en mi interior... ella no dijo nada y se fue, no estaba triste , es más me sentía contento porque tuve el valor de decirlo, llegó la tarde yo estaba en mi casa haciendo la tarea, en ese momento me llega un mensaje de la chica la cual me gustaba al leer el mensaje salté de alegría, grité y creo hasta llore de felicidad me dio la tan ansiada respuesta y para mi suerte me dijo que si, no lo podía creer que ella me dijera que si,era un sueño hecho realidad....
CONTINUARA...
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El amor lo único que nos hace falta...
RomanceAntes de iniciar este relato quiero dejar algo en claro esto NO es el típico relato de amor en el que un chico y una chica son felices por siempre ¡NO! Este relato habla sobre lo que todos alguna vez hemos sentido hacia alguien, ese sentimiento tan...