PDV: Anna
Todo era igual. La Tierra seguía girando, la gente seguía trabajando, y yo, yo seguía respirando. Nada había cambiado, excepto una cosa. Una cosa que para muchos era insignificante, para muchos desconocida. Ben. Ben no estaba, y ya no volvería.
Paseaba por el bosque, como de costumbre, lo hacía siempre que terminaba de correr. Andaba hundida en mis pensamientos, y mis pies me llevaron a aquel lugar. A aquellas rocas, en las que Ben y yo solíamos charlar, en las que intentó besarme, en las que lo vi por última vez. Bueno, en las que vi al Ben real por última vez, no a esa persona, la que estaba consumida por la ira, el caos, el miedo la muerte. No lloré, no me lo permití. Obligué a mis piernas a dirigirse a otro lugar. Lo que no supe, es que me llevarían a otra persona, y esa persona necesitaba ayuda.
- ¿Jane? - pregunté, aunque era evidentemente ella, su pelo rubio la delataba. - ¿Estas bien? - se secó las lágrimas y dijo:
- ¿A ti que te parece? - me senté a su lado.
- Puedes contarme los que te pasa. Si quieres. - suspiró.
- Nada...Estoy bien. - sonrió, muy falsamente. - Eso debería preguntarte yo. Ya sabes, desde lo de Ben...
- Estoy perfectamente. - Primera mentira. - Lo he superado. - Segunda mentira. - ¿Acaso no lo hago siempre? No es la primera persona a la que pierdo.
- Pero si la más importante. contestó. Nos quedamos en silencio, pero luego, rompí el hielo.
- Ahora enserio, cuéntame lo que te pasa. - dirigió la mirada hacia mí. - Si no, no podré ayudarte...-me cortó.
- Me he peleado con Newt. -hizo una pausa, corta, pero necesaria. - Me ha dicho cosas... cosas horribles. No puedo creer que me haya tratado así... yo... yo... - vi como una lágrima corría por su mejilla. Deseó mi muerte Anna.
Pude ver el dolor que sentía en sus ojos azules. Normalmente estaban llenos de alegría, pero ahora parecían desbocados, como el mar en una tormenta, en cierto modo triste, en cierto modo rotos. La abracé.
- Jane, no te atormentes por esto. Ya sabes, seguir cuando crees que no puedes más es lo que te hace diferente. - recordar esas palabras me hicieron sentir una punzada de dolor, y de nostalgia. Era lo que solía decirme Ben cuando me venía abajo, en los días oscuros. - Y tú, eres diferente.
- Gracias Anna. -me volvió a abrazar. - Eres la mejor. - se secó las lágrimas. - Venga, vamos a cenar. Hay sopa. - y se alejó.
*
*
*
Mientras Jane seguía en la cola, intentando reclamar su flan, me senté en uno de los troncos-silla, alrededor del fuego. Me fijé en Gally y Elisabeth, sentados juntos y lanzándose trozos de pan entre ellos, que monos, se notaba que se querían. Luego vi a Daisy y a Chuck sentados en el suelo. Parece que Chuck le había regalado una pequeña margarita y ella jugueteaba con ella. Después había Minho, Alby y Newt. Newt parecía apagado, llevaba diez minutos sentado y aún no había tomado ni una cucharada de la sopa de Frypan. Estaba deliciosa.
- Ei Anna! - me giré y Thomas se sentó a mi lado. - ¿Te vas a comer toda la sopa?
- Sí, es mía. No la toques. - aparté el plato de Thomas, ahí corría peligro.
- Vale, vale. -dijo levantando las manos indicando su rendición para comerse MI sopa.
De repente Thomas sacó una cuchara (no sé de dónde) y me robó mi plato de sopa. Comiéndose, por lo menos, cuatro cucharadas, antes de que pudiera quitársela y, posteriormente, tirármela encima.
- Perfecto. Eran mis pantalones favoritos.
- Lo siento... Te acompaño a buscar otros. - y seguidamente se levantó. - Venga vamos, las tiendas cerraran. - dijo sarcásticamente, que dijéramos, la caseta de los mapas, no se podría nombrar "tienda".
Lo seguí hasta la sala de mapas. Había estado pocas veces en ella de noche. Parecía más triste, solamente estaba iluminada por un par de velas y por los rayos de luna que se colaban por las ventanas.
- A ver... - dijo Thomas revolviendo el baúl de ropa. - ¿De qué color los quieres?
- ¿Enserio? Coge los primeros que encuentres. - sonreí.
- Tu misma, tengo un sentido pésimo para la moda.
Entonces me lanzó unos vaqueros cortos, negros. Me dirigí hacia una esquina, para que Thomas no me viera.
- Date la vuelta. -y así lo hizo.
Me quité los pantalones que llevaba, olían a sopa, y me puso los que me había dado Thomas. Sinceramente, pegaban bastante con mi camisa de tirantes blanca (bueno, medio blanca... una se ensucia mucho en el laberinto).
- Ya está. - se giró rápidamente y me miró de arriba abajo.
- Wow. -soltó. - Al final sí que tendré sentido de la moda. - sonreí.
Salimos de aquella choza para volver al centro del Claro. Iba delante de él, cuando de repente dejé de oír sus pasos. Me giré. Se había quedado ahí, en medio del pequeño claro que se había formado entre los árboles, mirando hacia arriba.
- Son preciosas. - dije, lo que hizo que dejara de observar el cielo y me mirase.
- Sí... -dijo, y me acerqué a él.
- A veces pienso como deben ser las estrellas fuera del Claro, si las veré, algún día
- Algún día las veras, saldremos de aquí. - se acercó aún más, mucho, demasiado. - Te lo prometo.
Nos miramos a los ojos, intensamente, por unas milésimas de segundos. Pasó su mano por mi pelo, dejándolo detrás de la oreja. Volví a dirigir mi mirada hacia sus ojos y me besó. Algo en mi interior se despertó, haciéndome sentir mil y un sentimientos, todos desconocidos para mí. Cerré los ojos y todo se desvaneció. Sólo estaban las estrellas, él y yo. Nos separamos, sonreí.
- Vaya. - susurró.
- Vaya. - contesté y Thomas sonrió por lo bajo.
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Y porfin, aqui teneis el primr beso de Thomas y Anna! Que os parece? :3 Sabeis que podeis alegrarnos el dia comentando o dandole a la estrellita!
Por cierto... Gracias por el 1K!!!! No podemos creerlo! Muchisimas gracias enserio, sois los mejores!
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Neverland °Maze Runner° ~Newt~ ~Thomas~
Fanfiction"Nunca decidí entrar en aquel pequeño juego perverso, pero tu me hiciste verlo de una manera diferente." Al llegar al Claro, lo dieron todo por perdido. Pero se dieron cuenta de que ahora, tenían amigos por los que luchar, amigos por los que valía l...