BATTLE ROYALE: Cobach Czm

Media Noche Ante Meridiem 3

Miguel teclea, está haciendolo cada vez más rápido, como para destruir el teclado de la computadora en cualquier momento.

Nos da una aire de lástima por lo que le esera a ese aparentemente grupo de inseparables amigos, puesto que la acci{on y pensamiento de uno de ellos está a punto de destruirlos.

Definitiamentenadie de nosotros puede predecir exactamente qué pasará en los próximos minutos, pero podemos estár seguros de algo: Será magnifico para la audiencia... Ya hay una tendencia en las redes sociales de la gente del capitolio de la nación.

Ilmar se dirige hacia ellos, solo uno de ellos lo sabe, y ahora la pregunta qué toda la audiencia se hace, es ¿Quién es este traidor?

Gerardo ha terminado de reabastecer ambos automóviles, hay algo diferente en él, el ha actuado diferente, la razón por la cual ha cambiado es evidente... ha comenzado el día tres

César se percata del cambio en el ambiente, puesto que también sabe lo que el día tres significa para todos.

Miguel se distrae y toma un pequeño descanso, justo cuando agarra lo que probablemente es lo último de hierba que verá en sus manos, antes de que todo el juego llegue a su fin... Es ahí cuando comienza el elogio nocturno de los caídos en el cielo.

Nada los puede preparar para el final de su alianza, nada excepto el mismo traidor entre ellos.

César baja con Miguel, que no hace otra cosa más que fumar como chimenea

—¿No deberías de estar haciendo algo más?—César le indaga a Miguel, mientras que él le echa el humo en la cara

—¿No deberías de vivir?—Miguel le indaga

—¿Pueden ver a esos tipos?—Los interrumpe Gerardo

—¿Eres o te haces?— Le indaga César, que le quita la droga a Miguel, para ingerirla el mismo

—Cada vez que lo veo y escucho, es como música para mis oídos... porque es uno menos... ya no me importa ni uno sólo de ellos— les explica, llamando su atención

—¡Es bueno saberlo!— le responde César tomando un rifle en modo de broma

—¿No crees que si quisiera matarlos ya lo hubiese hecho?—Gerardo le responde con seriedad

No tienen ni la más remota idea de lo que les espera... Mejor que sigan así

Gerardo Checa que los vehículos tengan suficiente combustible y agarra la bomba de mano que hizo con Miguel cuando no los observábamos.

Miguel vuelve a teclear devotamente en el comutador, podemos ver lo que parece ser excitación en nuestros monitores... Miguel está tan excitado que no nos sorprendería ver una erección en medio de la trampa y en su posible cadaver.

César lo observa... El sigue sin confiar en Gerardo en lo más mínimo, pero quizás Gerardo no deba confiar en él.

—¿qué haces Dross?—César Le indaga a Gerardo

—¿Crees que Baeza y Nahomy necesiten esto?—Se refiere a la seguna camioneta que está llena de lo que sea que tan devotamente han intentado hacer desde el principio.

Es probable que Gerardo sospeche de lo que tenemos planeado, por lo que las emociones que tiene en ese momento, sonalgo así como lo más cercano a la sospe

cha, temor y cobardía.

—¡YA CASI LO CONSIGO!—Miguel Exclama

* * *

Ricardo se apoya de César para poder mover el bote hacia el mar, de frente a nosotros.

Ellos siguen sin sospechar que monitoreamos todo desde aquí