Let me go

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-Joscelyn- su voz sedosa no era mas que un susurro 

-Mmmm- murmure en respuesta, las palabras sin acudir a mi boca, mi cerebro aún adormilado 

-My sweet Joscelyn- su voz se hizo mas ronca

estaba acostada sobre mi vientre, la seda de las sabanas era una constante caricia que me arrullaba, pero ahora era mas lasciva que relajante. Mis piernas ligeramente abiertas, estaba desnuda. William no me permitía usar ropa cuando dormíamos juntos y sinceramente me gustaba dormir así, con su piel contra la mía sin ninguna barrera de por medio. 

Sentí su peso trasladarse, antes habia estado a mi lado besando mi hombro mientras susurraba mi nombre en mi oído, ahora estaba sobre mi, su mano vagando por mis nalgas 

-William- gemí, cuando sus dedos se deslizaron por mis pliegues esparciendo la humedad que parecía no abandonarme cuando estaba con él 

-Me encanta esto- sus dedos me acariciaron con lentitud yendo de arriba a abajo -me encanta el efecto que tengo sobre ti- 

Asentí, no podía hacer mas, aun la bruma del sueño no me abandonaba y ahora mi cerebro se estaba llenando de hormonas, intoxicado por el toque experto de mi profesor. 

-siente- su pelvis quedo sobre mis nalgas y sentí su erección presionar contra ellas -mira lo que haces- 

Gemí e involuntariamente mi trasero se elevo

Su risa resonó en mi oído, amaba ese sonido pero ahora solo quería sentirlo dentro de mi 

Aun no estaba del todo consciente pero todo dentro de mi hervía queriendo mas, queriendo que sus manos me tocaran, que se empujara dentro de mi... 

-tienes cara de "follame"- dijo William con voz divertida, sacándome de mi ensoñación 

-hazlo- lo rete, totalmente despierta ahora, su piel estaba igual de caliente a como yo me sentía, intente moverme, pero se recostó un poco mas en mi, inmovilizandome 

Sonreí al espejo que el habia colocado en la pared lateral, su miembro quedo justo entre mis nalgas y me arquee, moviendo mi culo, acariciándolo de arriba a abajo 

Gruño 

-Bad girl- dijo con aquel acento que me hacia derretir 

-por favor- suplique sin vergüenza

 Él me dio una sonrisa lobuna antes de que su mano estuviera una vez mas entre nuestros cuerpos, explorandome antes de penetrarme con dos dedos 

Suspire, aferrándome a las sabanas, elevando mi trasero, arqueandome para darle un mejor acceso

Él se levanto, sentándose sobre sus talones 

-así- dijo, admirándome -te ves gloriosa- su voz estaba llena de admiración 

Sus manos amasaron mis nalgas y luego acariciaron con parsimonia mi espalda y hombros, lo hizo varias veces de ida y vuelta cada vez yendo mas cerca del centro de mi necesidad pero siempre evitándolo

Gruñí, frustrada 

Él rio. El muy maldito se rio

-Tan hermosa- su cadenciosa voz me hizo cerrar los ojos y apretar mis muslos. Se reclino sobre mi para besarme el hombro -quisiera seguir torturándote, pero....- la frase quedo colgando mientras la punta de su miembro me acariciaba desde atrás. Inmediatamente mi trasero volvió a alzarse dándole un mejor acceso a mi humedad 

-William... Señor- mi voz era jadeante y necesitada. Siempre era asi cuando me despertaba en medio de la noche o en las mañanas. Mi cuerpo parecía especialmente receptivo a esas horas, no requería mucho de su parte para que me tuviera suplicando 

-Esto sera rápido- deslizo la punta dentro y jadee -duro- hasta la mitad -manos siempre en la cama ¿entendido?- asentí y él se retiro 

Lloriquee 

era ridícula, patética, pero cuando sientan la lujuria dominar cada célula y su cuerpo desesperado por liberación, me entenderán.

La punta tentó mis pliegues palpitantes 

-quieres esto dentro de ti, my little girl?- la pregunta me frustro en cantidades industriales, quería gritarle que era mas que obvio pero solo un suplicante jadeo salio de mis labios 

-que- 

Oooh!! lo odiaba tanto en estos momentos 

-Si, señ...- no termine la frase, se empujo dentro de mi rápido y duro quitándome el aliento 

una de sus manos fue a mi cabello y yo me arquee mas, mi trasero mas elevado mientras mis pechos se presionaban contra la cama, mis manos se aferraron mas fuerte a las sabanas evitando la tentación de llevarlas hasta su delicioso trasero y arañarlo 

Gruñidos empezaron a llenar la habitación y el golpe de nuestras pelvis conectando cada vez que el me embestía fue en crescendo 

pequeños y agudos gemidos salían de mi mientras William respiraba mas fuerte. 

Estaba cerca, tan cerca.... 

-Si, Joscelyn- su brazos estaban a ambos lados de mi cabeza y su frente se apoyo en mi sien 

Gemi, mas fuerte cuando roto sus caderas antes mientras se empujaba dentro de mi, tocando todos los lugares correctos 

-Oh, Dios!- todos mis músculos se prepararon y cuando el orgasmo me golpeo - WILLIAM- grite mientras mis caderas se movían erraticamente y mi cuerpo se convulsionaba con ola, tras ola de placer 

-JODER!- William mordió la base de mi cuello, provocandome cosquillas y esas cosquillas mezclándose con mi orgasmo volviéndome loca. Mi cerebro parecía explotar mientras mi cuerpo se retorcía queriendo huir del placer, pero queriendo al mismo tiempo que nunca terminara. 

-Joscelyn- rugió William cuando se vino, aun gozando de las pulsaciones de mi orgasmo o los restos de él 

Me deshice en la cama y William pronto me siguió derrumbándose sobre mi

El sueño volvía a reclamarme mientras mi respiración se regulaba - William...- no dije nada mas, mis parpados demasiado pesados para permanecer abiertos.

-Mi Joscelyn- su voz estaba teñida de muchas emociones y trate de despabilarme de entender, pero no lo logre... sentía sus labios regar suaves besos sobre mi hombro y cuello 

William murmuro algo mas, algo que no pude entender, la bruma del sueño reclamándome....



-WILLIAM- grite, llamando en la oscuridad 

Estaba sudorosa mi respiración agitada y mi cuerpo en llamas, necesitando la liberación que solo alguien podía darle. 

Me senté, mi espalda apoyada en la cabecera de la cama y atraje mis rodillas a mi pecho mientras me abrazaba. 

-nunca lo habia visto tan posesivo con alguien- 

-mi Joscelyn-

Las palabras bailaban en mi cerebro, repitiéndose una y otra vez. 

Me cubrí los oídos con las palmas de las manos como si eso ayudara en algo 

Lagrimas rodaron por mis mejilla 

-déjame ir- rogué en silencio a alguien a quien no podía escucharme, rogando por algo que necesitaba pero no quería.







My sole regretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora