Capitulo 35

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Alejandra

Desperté gracias al sonido del despertador y, sin quererlo ni desearlo, me levanté de la cama en dirección al baño.

Hoy era viernes y ya había pasado dos semanas aquí. Estaba bastante a gusto con todo lo que pasé aquí. Seguí hablando con Kat, Patrick y Tyler, quienes ahora son mis grandes amigos. Tenía algún que otro amigo en el instituto pero nadie con quien pudiera compartir mis ideas tranquilamente. En el instituto no me iba para nada mal y en casa tampoco.

Ya nos encontrábamos en el apartamento de mi padre hace como una semana y es bastante acogedor. Una sala, cocina, baño de visitas, una habitación de visita, mi habitación con balcón y baño propio y la habitación de mi padre con su baño propio componía el gran apartamento.

Luego de darme un baño rápido y hacer mis necesidades, caminé a mi closet y saqué unos jeans claros, no muy sueltos, una blusa manga larga bastante delgada color turquesa y unas vans del mismo color que la blusa. Los viernes, en el instituto, nos daban el privilegio de vestirnos todos con la ropa que queramos, así librándonos un día del uniforme.

Fui directo a la cocina luego de alistar la mochila y encontré a mi padre con una taza de, supongo yo, café en la mano.

— Buen día, hija.

— Hola, pa. –me acerqué a él y luego de darle un beso en la mejilla me senté en la silla del frente.

— No sabía si querías jamón y queso o mantequilla así que no te hice el sándwich.

— No hay problema.

Cogí la mantequilla y luego de untarla en el pan comencé a comer mi desayuno. Había subido de peso. No mucho pero lo había hecho. Se podría decir que cada vez estaba más cerca de un peso ideal para mi edad y estatura. Aún me faltaba pero poco a poco los números iban subiendo.

Terminé mi desayuno y luego de volver a mi habitación para lavarme los dientes, salí junto con mi padre. Me adentré al asiento del copiloto y en menos de diez minutos nos encontrábamos en la puerta del instituto. Una despedida rápida con mi padre y ya me encontraba en la puerta del mismo.

— ¡Amiga británica! –volteé en dirección a la dueña de esa voz.

Kat se había acostumbrado a llamarme así.

— Hola. -saludé un vez que se encontraba frente mía.

— Estuvimos hablando por el grupo. –señaló su celular– ¿Irás? –fruncí el ceño.

— No pude ver el móvil ayer. –respondí.

Estuve toda la tarde en una video-llamada con Alex y luego con Niall.

— Iremos a la piscina hoy luego de clases. –avisó– Patrick dio casa. Almorzaremos ahí y luego entraremos a la piscina.

— Hum... no lo sé. Debo comentarle a mi padre y necesito pasar a por mí traje de baño. –respondí.

— Dile a tu padre, ahora. Yo vine en mi auto, –agitó las llaves feliz–, así que podré llevarte para recoger tu traje de baño y luego ir a lo de Patrick.

Asentí automáticamente y le mandé un mensaje a mi padre explicándole el asunto. Tocó la campana y nos encaminamos a clase de Música. Tomé asiento con Tyler, quien había reservado lugar a su lado, y Kat se sentó con Patrick en la mesa de enfrente.

— Si iré. –dije tocándole el hombro a Kat.

— ¿Tu padre te dejó? –asentí.

— Acaba de mandarme un mensaje. –respondí– Dice que no hay ni un problema contando que voy con ustedes.

Bullying, Anorexia y un Angel - Niall HoranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora