Capítulo 36.

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Ella era inestable, no podía estar con ella, podría lastimarla en cualquier momento.

Mabel se fue de la casa de Hope sin previo aviso y se subió al primer autobús que vio. Ella sólo quería huir.

El autobús la llevó a uno de sus lugares favoritos del mundo (con el que, curiosamente, nunca había ido con Hope), un bosque en las afueras de la ciudad, con muchos árboles y césped bastante crecido.

-Hola, hermosa. -Saludo la rubia a una yegua embarazada que venía cuidando desde hacia unos meses.

La yegua relincho en respuesta, y Mabel se acercó a acariciarla.

La rubia se fue en frente de una pequeña laguna que había ahí, y sin importarle nada, se tiro de lleno al agua.

A Mabel le encantaba sentir el agua en su piel, así que se sumergió y agarró unas algas que había en el fondo de la laguna, y las arrancó.

Mabel salió del agua y miró hacia las montañas, siempre le habían dado curiosidad.

Y ahí es donde iría para no volver la próxima semana.


¡¿Epoca Merodeadora En La Vida Real?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora