Hope, Regulus y James fueron la casa de Mabel caminando, por el camino hubo mucha atracción sexual entre James y Hope, bueno, la verdad no.
Los tres chicos llegaron a la casa de la rubia y tocaron el timbre, unos minutos después, Mabel abrió la puerta, pero la cerro automáticamente.
Hope solo rodó los ojos y empezó a golpear la puerta.
-¿Y si hacemos un muñecoooo? Ven vamos a jugaaaar. -Empezó a cantar Hope.
-Chupala. -Le grito Mabel desde el otro lado.
-DEJA DE HACERTE LA EMO GÓTICA PUTA Y ABRINOS.
-¡No puedo, están mis padres!
-¿Te dejan salir...?
-Si. -Contestó Mabel. -Pero no quiero, chau.
-¡ABRÍ!
En respuesta, Mabel le tiro un libro desde la terraza, era Ciudades de Papel.
-¡Me lo voy a quedar! -Grito Hope mientras agarraba el libro del suelo.
-¡Me chupa un huevo, váyanse! -Grito Mabel desde la terraza.
-No hasta que salgas. -Y en eso, Hope se sentó y les hizo una ceña a Regulus y James para que se sienten a su lado a lo que estos le hicieron caso.
Entonces, a Hope se le ocurrió la casualidad de la vida de ver a la esquina, donde Mabel se estaba yendo.
-¿Como chota llegó hasta allá? -Preguntó Hope mientras las señalaba.
-Tal vez uso sus tácticas ninjas. -Le respondió Regulus mientras los tres corrían a Mabel.
-¡Para, puta! -Grito Hope dando vuelta a Mabel.
-Agh ¿que quieren? -Preguntó la rubia de mala manera.
-¿Por que nos estas evitando de la nada? -Preguntó Regulus algo receloso.
-¿De la nada? Casi los mato ¿recuerdas? No quiero que estén aquí. -Respondió Mabel firme.
-¿Y donde quedó la chica que decía que me amaba?
-Murió, como tu dentro de unos años. -Le contestó Mabel rodando los ojos.
-Sólo quiero que sepan que estaba consiente cuando los amenacé a todos con la varita de esa sangre sucia, y lo haría de nuevo si intentan separarme de Hope.
-Nadie intento separarte de Hope, Mabel. -Le respondió James con cuidado.
Mabel sólo rodó los ojos.
-Hope es mía, y nadie me la va a sacar.
-Mabs, es suficiente. -La corto Hope.
-Ya veo a quien defiendes. -Le respondió Mabel volviendo a su casa, pero antes de entrar, agarró el cuello de la camisa de Regulus, lo acercó a ella y le dio un beso. -Aún te sigo amando un poquito. -Y entonces les cerro la puerta en la cara.
Seguía teniendo la idea de irse y no volver.
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¡¿Epoca Merodeadora En La Vida Real?!
De TodoLas vidas de Mabel Quinteros y Eileen Hope Kimberly no eran ni especiales ni diferentes. Mejores amigas conocidas por una amiga en común se hacen inseparables aunque no estén en las mismas escuela. Nada es mágico o fuera de lugar ¿o si? Pero la vida...