Paciencia. ➵ Katekyo Hitman Reborn!

Capítulo |1|

Capítulo 1.

¡Me aburro! ¡n-no, aleja eso de mí!

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Se hallaba una jovencita de hebras castañas, y ojos oscuros sentada en una banca de espera de un hospital cualquiera. Su tez palida resaltaba sus pestañas gruesas y sus labios pequeños más sin embargo, carnosos. La chica se llamaba Liliana Soto, cruzada de brazos y piernas mantenia con una fiera mirada y un humor de perros. Tenía puesto una blusa blanca de manga larga hasta los ante brazos, unos Jeans azul oscuro y de calzado unas botas marrones al puro estilo militar.

Acompañándola, un joven de hebras finas y largas, amarradas en una trenza que caía por su extensa espalda de hombre, sus afilados ojos de color negro,  utilizando un traje simple de maestro del Kun-fu color rojizo y un pantalón holgado de color blanco junto con unas zapatillas del mismo color. Uno de los ex arcobalenos, el del chupete rojo, llamado Fon.

Éste, sonreía levemente en tanto le echaba una hojeada a la revista que sostenía con sus manos como si fuese lo más interesante del mundo.

ㅡ¿Hm...? ㅡemitio un sonido de sus labios rosados al dejar de leer y prestarle una mínima atención a su compañera de banca que por poco y hundía la silla por el semblante que se traía de ogro feroz, y .. bueno, eso es lo que pensó Fon riendo levemente para sus adentros. Dejo escapar una pequeña risita y embozo una tranquilizadora sonrisa marca lumine White al ver la cara que adornadaba a Lilianaㅡ. Liliana-Chan.. deja esa cara, ten paciencia.. no tardaremos mucho...ㅡdio animos.

ㅡ¿Sabías que esta es la única cara que tengo? ㅡse defendió con un tono sarcástico.

Su mordaz respuesta causo la risa de Fon que negaba.

ㅡLo sé, me refería al ceño fruncido que te traes pequeña.. ㅡle informaba moviendo sus orbes hacia las pequeñas arrugas que se notaban por las muecas del pasar de los años.

Gruñioㅡ. Tch, esta bien. ㅡacepto al principio, chasqueando la lengua. Luego de unos minutos su ceño fruncido desapareció relajando todos los músculos de la cara.

Fon asintió complacido al ver como la dulce Lily siguio su pequeño consejo. Volvió a abrir la revista en la pagina que quedo y leyó en primera plana el titulo de: "Como relajar a tu esposo malhumorado. de Juliana Martin para las esposas de ahora."

Suspiró Fon.

Mi caso.

Unos minutos después.

ㅡHmm.. esto es un aburrimiento. ¿No nos pueden atender ya? ㅡsolto impaciente sin dejar su rostro ahora motono. Fon volteo a verla e introdujo un dedo donde se suponía que iba en la pagina para no perder su momento de lectura.

ㅡComparto su opinión, también me encuentro aburrido. ㅡle dejo saber suspirando con resignación para después sonreirle, pero ese "también estoy aburrido" no se lo creyó la muchacha.

ㅡSí.. ajá, mira como me la creo. ㅡironizo.

ㅡBueno.. si no me crees,¿qué tengo que hacer para que me creas? ㅡformulo.

ㅡPúes.. pues.. ¡yo qué sé! lo normal es poner una cara inexpresiva y te quejas toodo el tiempo. ㅡse encogió de hombros sacudiendo su mano de un lado al otro y viceversa.

ㅡOh.. ¿solo es eso? ㅡpreguntó incrédula mente. Lily le afirma sin másㅡ; Aquí vamos.. ㅡmurmulla concentrándose..