Pasaron solo un par de semanas desde que vive junto a Genos y aunque no se lo dijera su compañía le era agradable, después de todo siempre vivió sólo además de que el joven cyborg se ocupaba de él devotamente aseando la casa, cocinándole y preparando todo lo que él necesitara.
-¿Otra vez anotando cosas? -no pudo evitar preguntar eso, siempre que decía alguna frase que pareciera o no increíble su ahora aprendiz lo escribía en aquel cuaderno como si fuese algo importante -
-Sí, Sensei ... ¿puedo preguntarle algo? - Su semblante se torno serio llamando su atención-
-¿Hm? ¿Qué sucede Genos?
El nombrado quedo en silencio sólo observándolo hasta que soltó su pregunta.
-¿Tuvo relaciones con una mujer alguna vez?
-Saitama quien estaba semi-acostado tomando de su tasa -distraído- no se vio venir tal pregunta logrando casi ahogarse con aquella bebida- ¿¡QUÉ!?
-¡Sensei! -Se acercó a él levantándose de su lugar- ¿está bien? Tenga más cuida...-
No pudo terminar su frase siendo interrumpido abruptamente.
-¡Si, si como sea! primero dime ¿¡Qué fue esa pregunta!?
-Ah, sucede que en la TV pasaron un documental donde describía las relaciones de los hombres así como usted.
-¿Así como yo? -Pregunto enarcando una ceja confundido- ¿A qué te refieres?
-Lo que confundí con una armadura color piel sobre su cabeza.
-...- Entendiendo a que se refería contesto alterado, nadie se metía con su calvicie- ¿¡Tienes algún problema con eso!?
- No, por favor no me malinterprete. -guardo unos minutos en silencio tratando de armar bien sus palabras de manera que su sensei no lo tome como una ofensa- Me refiero a si usted estuvo viviendo con una mujer antes de mí.
-Ah... no, nadie ¿de todas formas porque querrías saber eso?
-Me interesa saber qué clase de vida tenía antes de conocerme es todo. -se levantó del lugar buscando algo para limpiar el resto de bebida derramada-
-Oh, ya veo... -dijo simplemente siguiéndole con la mirada- aunque no ha cambiado mucho y no es como si fuese muy interesante mi rutina en ese tiempo.
Terminó de decir aquello agarrando uno de los mangas que tenía por ahí tirado eligiendo al azar.
Genos quien estaba en la cocina salió de allí volviendo a la sala para limpiar y juntar algunas cosas que estaban allí tiradas, en un momento se agachó mirando debajo de la pequeña mesa comprobando que no había nada se dispuso a levantarse pero al girar piso un manga resbalando con este haciéndole caer sobre su Sensei.
-...-
-...-
Pasaron unos minutos y ninguno de los dos decía nada, uno -Saitama- tenía la mente en blanco y el otro simplemente solo observándole.
-Ah, disculpe. -Estaba dispuesto a levantarse pero torpemente apoyo la mano sobre otro manga resbalando y cayendo nuevamente sobre el pecho contrario-
-...- El Héroe lo tomó con un brazo de la cintura provocando que el joven cyborg le mire atento-
- ...¿Saitama...sensei?
No entendía que diablos estaba haciendo pero nunca creyó encontrar a Genos tan... ¿lindo? Su cabello rubio, sus ojos con esclerótica negra y esos obres dorados tan penetrantes...
Espera ¿Qué? ¡No, no, no! No es posible que piense en su aprendiz de esa forma, además ¡era hombre y...! ¿Hombre? Bueno si, ¡pero era un cyborg!
-¡G-genos! ¿¡Qué tal fue tu día!? -Soltó esa pregunta por los nervios pero sin dejar el agarre en la cintura contraria, se sentía... agradable -
-Bien, ¿a usted como le fue?
-Bien, ¡bien! ¡muy bien! Ha-ha.
-Ya veo. Me alegro por usted sensei. -Dijo aquello mostrando una pequeña sonrisa sincera de esas que sólo le mostraba únicamente a él haciéndolo sonrojar- Ah, disculpe debo terminar esto.
El joven cyborg se levanto evitando alguna otra extraña caída dejando a Saitama con una sensación de vacío.
Genos seguramente no se dio cuenta de sus nervios -que ni él entendía porque eran- pero algo comenzó a llamar la atención del héroe y era que estaba sintiendo cierta atracción por su ahora compañero de piso asustándose de sí mismo por su reciente gusto, no era porque Genos fuese horrible, ¡eso jamás! Podría afirmar que comenzaba a pensar en él como "una dulce ama de casa atractiva y encantadora" porque tenía todo lo que describiera a una, era muy atento, se preocupaba por él, además de que su vida era mucho más ordenada desde que llego y su presencia no le molestaba en lo más mínimo.
-...- se quedó sumergido en sus pensamientos hurgándose la nariz mientras que la razón de ellos permanecía a espaldas suyo mirando algo en el laptop- oh... ¡no puede ser!
Ese grito hizo sobresaltar levemente al cyborg haciéndolo voltear - ¿Sucede algo sensei?
-¡Woah! ¿¡G-genos!? -trató de calmarse no lo había sentido para nada- ¿Qué haces ahí?
-Estaba leyendo las opiniones en el foro de los Héroes y hablan mucho de usted sensei, al parecer les intriga saber qué clase de poder tiene.
-Oh -se aclaró la garganta agradeciendo el no haber dicho nada estando sumergido en sus pensamientos- así que es eso...
-Sí. -Se giro viendo el aparato nuevamente- Sensei es impresionante.
-Deja de exagerar -en realidad le agradaba que lo alague de esa forma- Y... ¿Qué dicen de ti?
-¿eh? Ah, lo normal supongo.
-¿A qué te refieres con "lo normal"?
-Según dicen aquí tengo un club de fans oficial.
Comenzó a darle un tic en el ojo no sabía si su molestia se debía porque tuviera tan pronto un club de fans OFICIAL y el no, o el hecho de que Genos ahora tenga a muchas mujeres y hombres detrás suyo-
-Pero que bien. -contestó sonando desinteresado-
-Supongo.
Ambos quedaron en silencio un par de horas más, uno entretenido leyendo un manga y el otro atento en el laptop hasta que llegó la hora de dormir.
El joven cyborg habiendo apagado todas las luces se recostó -cabe destacar que dormían uno al lado del otro.- ¿Sensei?
Saitama ya se había dormido empezando a roncar a pierna suelta estiro un brazo en el aire -al parecer estaba soñando-
Oh ya se durmió -al verlo destapado se acercó más para cubrirlo con las sabanas-
Otra vez.
Por un momento creyó que algo lo había aplastado haciendo caer todo su peso sobre el cuerpo contrario pero no fue así, el brazo del mismo sensei lo atrapó apretándolo contra el suyo. Al darse cuenta de esto elevó su rostro para observarle podía sentir su respiración muy cerca aunque para él no le fuese incomodo la cercanía no deseaba aplastarlo con su frío y mecánico cuerpo intentando levantarse sin éxito notando que no pudo moverse ni un milímetro -su sensei lo sostenía firmemente de la cintura-.
-Genos...
-¿...? - no escucho mal ¿lo estaba llamando entre sueños? Iba a decir algo pero no quería despertarlo por lo que optó en guardar silencio-
Se quedó dormido apoyando la cabeza sobre el pecho del héroe con ambas piernas entre las contrarias tal vez una posición un tanto indecorosa para cualquiera que los viese así pero al estar solos el único que despertó confundido y sonrojado esa mañana fue nuestro querido Saitama-sensei.
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La calvicie no es un impedimento para amar. Saitama: ¡Oi! ¬¬*
FanfictionNuestro querido Héroe comienza a sentir algo "extraño" -según él- por su joven y auto proclamado aprendiz. SaitamaxGenos