-Definitivamente. Creo que hoy me voy a morir- digo mientras analizo la situación en la que me encuentro- No es normal, simplemente no es normal- me sigo quejando con Amanda al lado mirándome con fastidio- el destino me está advirtiendo que algo malo va a suceder ¡es eso!
Después de la corta discusión que tuve esta mañana con Andrés con respecto a que hoy no voy a permitir que me moleste ni me fastidie el día, él simplemente no ha hecho nada, digo ¡Nada! Ni siquiera me ha mirado, me ha ignorado, me pasa por el lado y ni me ve ¡pero qué demonios le sucede! ¿Será que tiene fiebre? ¿Estará enfermo? Conociendo a Andrés desde hace más de 5 años y siendo testigo y víctima de sus molestias diarias me resulta extremadamente perturbador el hecho de que no me preste atención. Sigo decidida en que hoy me voy a morir.
- ya relájate, no es para tanto ¿acaso no era lo que querías? Pues ahora lo tienes, aprovéchalo- dijo con simpleza Amanda ¿cómo diablos puede estar tan tranquila en una situación así? ¡NO me parece normal que de repente el molesto Andrés deje de hacerme bromas solo porque yo se lo pida! No, de hecho, vuelvo y repito ¡No es normal!
- ¿te estás escuchando? - le preguntó estúpidamente mientras la miro como si estuviera vomitando arco iris- ¿acaso te volviste loca? ¿Acaso el mundo amaneció al revés hoy?- sigo preguntando estupideces mientras que ella solo rueda los ojos y bosteza y solo me mira como si me estuviera diciendo la cosa más obvia del mundo.
-eres Estupida Sam -dijo con simpleza. No sé si ofenderme o dejarlo pasar...¿pero qué clase de mejor amiga tengo yo?
-¿ah?
-no puedo creer que no aproveches un día así. Estar relajada (o entre lo que cabe relajada), sin la preocupación de que los dos monos salvajes estén planeando algo en tu contra, o simplemente molestándote, en fin, lo que quiero decir es que está pasando ¡esta pasando! ¿Y tú qué haces? estas sentada paranoicamente en la mesa de la cafetería esperando a que pase algo que obviamente no va a pasar. Solamente relájate - explicó moviendo los brazos por todos lados tratando de explicarme como si estuviera hablando con una bebe. Yo simplemente la miro analizándola como si le fuera salido un cuerno en la cabeza.
Según los estudios recientes (realizados hace menos de dos minutos en la cafetería de la escuela) he llegado a la conclusión de que pudo haber pasado dos cosas: uno, a Amanda la secuestraron los extraterrestre anoche y le hicieron un lavado del cerebro. Esto causó que ella amaneciera pensando cosas que son total y completamente ilógicas y estupidas haciendo creer en cosas que no son ciertas; y dos, anoche se cayó de la cama y esto causó una terrible falla en su cerebro que hace que diga cosas ilógicas... Si, he escuchado que si se golpea a la persona en donde ya se ha golpeado anteriormente ella puede volver a la normalidad o algo así leí ¿me pregunto si...? Cerre mi puño y lo mande directamente y su cara.
-¡PERO QUÉ MIER...- uy creo que eso dolio- ¡PERO QUÉ DEMONIOS TE PASA! ¿Por qué me golpeaste?
- lo siento- digo bajando la cabeza ocultando mi leve sonrisa- solo quería ver si golpeándote de nuevo podía hacer que volvieras a ser tu- digo con una sonrisa inocente. Ella solo me mira fijamente. Yo la sigo mirando con una sonrisa inocente. Y ello solo me mira fijamente. Esto ya se ve raro, creo que ese golpe lo empeoro ¿y si mejor la empujo? Yo creo que es mejor. Siguiendo mis instinto y lo que me dice el corazón lanzó mi pie hacia su silla y la empujo haciendo que caiga de culo sobre el suelo.
- ¿ ACASO TE VOLVISTE LOCA? ¿QUÉ ES LO QUE TE OCURRE? - me grita y me mira fulminante mientras que todo el mundo nos ve, no entiendo, ella siempre tiene que hacer un drama por todo, quien la entiende.
- solo quería comprobar que el otro golpe funcionó- digo como si fuera lo más obvio.
- ¿con una amiga así para que quiero enemigas?- preguntó al cielo y se marchó ¡se marchó! ¡Se fue y me dejo! Trate de seguirla pero al levantarme de la silla me di cuanta de que le camisa se me había enganchado a la silla y no me podía mover, pero ya Amanda se estaba yendo y yo no podía dejar que se escapara así que sin importarme que se rompiera la camisa o no fui detrás de ella, al hacerlo la silla de vino conmigo y la estuve rodando por toda la cafetería hasta llegar a la puerta ¡uy pero que silla tan pesada! Ya harta de la silla y del jaloneo con la camisa, con toda la fuerza que pude la arranque rezando para que no se rompiera y pues... Diosito no oyó mis plegarias, la camisa se rasgo por arriba del ombligo dejando parte de mí abdomen al descubierto, que genial, Samantha Crawford portando la nueva moda. Ya por fin terminando de salir de la infernal cafetería respiro aliviada y me paro observando y meditando todo lo que acaba de pasar, justo cuando siento como un chorro de pintura roja va bajando por mi cabeza hasta cubrirme completamente de pintura. Impactada buscó con una mirada furiosa al culpable de esta desagradable situación, pero no me sorprende tanto al ver al final del pasillo retorciéndose de la risa y con las manos manchada con la evidencia a Andrés Smith y su mejor amigo mono salvaje Kevin
-¡LOS VOY A MATAR!