Capítulo 22 ¿Boda?

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Quieres...casarte conmigo-sus palabras me dejan helada-

D-Dylan, ¿lo dices en serio?-digo muy nerviosa-

Si, me he dado cuenta de que tú eres la única mujer con la que quiero estar-dice mirándome directamente a los ojos-

Estoy emocionada, una lágrima humedece mi mejilla

Yo...-me tiro a sus brazos y le abrazo con fuerza-

Entonces...¿eso es un sí?-dice contento-

Sí-digo y directamente le beso-

Miro mi mano ahora decorada con un precioso anillo

¿Cuánto te ha costado?-digo mientras que miro el anillo-

Eso no se pregunta-dice Dylan riendo-

Ah...vale...disculpe usted-digo riendo-

Nos dirigimos a mi casa

Oye, las chicas me han dicho que luego va a venir alguien a visitarnos, ¿te quieres venir?-digo mirándole con cara de corderito degollado-

Bueno...si la princesa quiere-dice Dylan, seguidamente me agarra de la cintura y me atrae hacia el haciendo que peguemos nuestros cuerpos-

¿Me vas a besar ya?-digo susurrándole-

Quiero hacerte esperar-dice sonriendo-

Te gusta verme impaciente, ¿eh?-digo riendo-

Le agarro la parte de atrás de su cabeza y atraigo sus labios a los míos

Wow ¿el bombero te ha hecho experta en besar o qué?-dice riendo-

Sí, me preparó una clase intensiva ¿no te jode?-digo riéndome-

**

Entro a casa con Dylan cogido de mi mano

Ponte cómodo-digo señalándole el sofá con una sonrisa en la cara-

Vale-dice-

Iria sale de su habitación

Hola, hola jovencita-dice Iria mientras que cierra la puerta de su habitación con un portazo-

Hola-digo alegremente mientras vuelco sobre un plato nachos-

¿Qué t...? ¿Qué hace este aquí?-dice mirándome con el ceño fruncido-

Y-Yo...-dice Dylan y yo me giro-

No, no...explícamelo tú-dice dirigiéndose a mí-

Iria...-intento terminar pero se queda embobada mirando algo-

E-Eso...es..un, un, un a-anillo de com-promi..so-dice mirando perpleja mi mano-¿Te vas a

c-casar?

¿Sí?...-digo intentando mirar a otro lado-

Pero...¿¡Tú estás loca!? ¿¡Solo tienes 17 años!?-dice histérica-

Te recuerdo que mañana cumplo 18...-digo con una sonrisa nerviosa-

¿¡Mujer de Dios...!? ¿Puedo ser una de tus damas de honor?-dice sonriendo-

Claro...-digo aún estupefacta por su cambio de humor-aún me sorprenden tus cambios de humor

Jajajaja...ahora a ver cómo reacciona...ups que me voy de la lengua...adiós voy a arreglarme, te recuerdo que tenemos visita-dice guiñándome un ojo y seguidamente entra en su habitación-

¿Otra vez tú?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora