Mi amor por Skype

La pelea

"A qué te refieres". Responde como si nada. Es un imbécil.

"Me refiero que siempre que hablamos sales con lo mismo, no piensas en otra cosa"

"No te pongas así".

"Como que no me ponga asi. Parece que solo me hablas cuando te quieres masturbar"

"Tu sabes que no es así"

"Y entonces como es. Porque en lo que hemos hablado hoy llevas 4 veces que empiezas a hablar de sexo"

Este es un idiota esto se acabó. No pienso seguir hablando con alguien que solo piensa en tener sexo. Esto es increíble. Y la verdad esque estoy encariñada con Diego porque en las pocas veces que es una persona decente, es muy atento y lindo. Pero siempre la caga. No solo el siempre que se está iniciando algo sea por donde sea, en algún momento alguno la caga. Y por el momento Diego va ganando.

"Ana sabes que yo te quiero mas que solo para sexo"

Aveces me dan ganas de decirle que no me llamo Ana, pero no lo hacía por miedo. ¿A que? No lo se, pero me daba miedo.

"Pues por el momento no lo estas demostrando. Adiós Diego"

Después de eso, me senti mal con el. Porque tal vez yo exagere mucho las cosas. Y yo sabía que Diego me tenía cariño. Los dos, era extraño porque cuando hablaba con él me sentía diferente. No quiera dejar de hablar con el.

A la mañana siguiente encendí mi computadora y tenia un mensaje. De el obviamente.

"Ana lo siento mucho no quería hacerte pensar que solo te hablo para sexo, quiero que sepas que me importas y que me encanta hablar contigo. Eres una mujer sensacional y adoro cada vez que hablamos. Lo siento. Porfavor no quiero que pienses eso de mi"

Era una de las cosas más tiernas que alguien me había dicho. Y creo que estaba exagerando porque Diego sentía lo mismo que yo. Nos sentíamos diferente cuando estabamos hablando y nunca me habia sentido asi por alguien. Pocos minutos después de que leyera me llego otro mensaje.

"Te quiero"

Diego era dulce y tierno. Mientras yo era lo contrario, pero él llegó a quererme no sabía si era de verdad pero me lo creí. No pude evitar sonreír.

En ese momento me di cuenta, que me estaba enamorando de él.