Despierta ya o esto se nos va a ir de las manos, ¿no lo ves? Sabes que me quedaría contigo siempre, pase lo que pase, pero el reloj avanza y no perdona un segundo. ¿Lo sientes? Sin ningún sueño y con ganas de soñar, los fuimos gastando, como las ilusiones que se acaban, es como si nos estáramos yendo sin nada que nos pueda salvar, sin nada que nos mantenga a flote. Pero aun así, acostumbrados a esto, el daño se fue haciendo a menos, y yo te puse la solución en los ojos y ni lo supiste ver, o simplemente no querías.
Tu, princesa de todos los cuentos, hiciste que tuviera un motivo por el que luchar, yo quería que tu fueras la primera cosa en mi mente, la razón por la que tener un sueño, y haciendo oídos sordos, el corazón solo pedía un poco mas, pero siempre era un poco mas, nunca era suficiente, por muchos pedazos que quedaran de el. Todo esto acabará por convertirse en mi perdición, así que sálvate tu, puedes irte y todo volverá a comenzar otro martes.
Nadie dijo que seria fácil, con solo un rumbo siendo una bala perdida, pero puestos a perderse que sea en tus ojos, que yo lo veo todo demasiado oscuro, caótico, y yo tan torpe yéndome como un barco a la deriva sin ningún plan de emergencia.